Las autoridades de Nueva York recomendaron este martes 16 de agosto a los residentes que ahorren agua en momentos en que se registra una sequía casi inaudita en la mayor parte del estado, con algunos puntos especialmente afectados por la falta de lluvia, como la Gran Manzana.
La gobernadora, Kathy Hochul declaró nivel de “vigilancia” por sequía —el primero de cuatro niveles de gravedad— en casi todos los condados del estado, lo que no acarrea restricciones por el momento, pero alentó a los ciudadanos a conservar agua en las “próximas semanas” en el caso de quienes dependen de pozos privados.
Esa vigilancia se activa según un índice que mide los niveles de precipitación, así como los de los lagos, reservas, ríos y corrientes subterráneas, indica un comunicado.
Según el mapa de las autoridades, solo están libres de vigilancia la zona más al norte del estado y el área metropolitana de la ciudad Nueva York, si bien los servicios meteorológicos han puesto a la gran urbe en la categoría de sequía “grave” por primera vez en veinte años por la falta de lluvias.
Los estados vecinos de Nueva Jersey y Connecticut también están sufriendo diferentes niveles de sequía después de uno de los veranos más secos que se recuerdan en la región en varios años, lo que ha llevado a sus autoridades a pedir contención con el agua y cuidado con el fuego.
Este martes, el Gobierno federal anunció que la histórica sequía en el oeste sigue drenando el Lago Mead, la mayor reserva artificial de agua de Estados Unidos que está al 27 por ciento de su capacidad, y avisó que los estados de Arizona y Nevada tendrán que reducir su uso del agua del río Colorado.
Sequía en el río Rin amenaza con detener el transporte de mercancías en Alemania
Las fábricas alemanas podrían tener que reducir su producción o detenerla por completo porque los menguantes niveles de agua en el Río Rin complican el transporte de mercancías, afirmó este martes el principal grupo de presión del sector industrial alemán.
El nivel del agua del Rin en Emmerich, cerca de la frontera holandesa, cayó cuatro centímetros más en 24 horas y llegó al cero en las mediciones de profundidad.
Las autoridades señalaron que la ruta navegable transportes aún tiene una profundidad de casi 2 metros, aunque el registro mínimo del martes reflejaba la grave falta de agua tras meses de sequía en buena parte de Europa.
“La sequía actual y los bajos niveles de agua amenazan la seguridad de suministro de la industria”, dijo Holger Loesch, subdirector del grupo de cabildeo industrial BDI.
Loesch dijo que pasar las mercancías del río a trenes u otros transportes es difícil debido a la capacidad ferroviaria limitada y la falta de conductores.