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¿Amenaza a la OTAN? Rusia despliega cazas con misiles hipersónicos a enclave báltico

Cazas MiG-31 con misiles hipersónicos llegaron a la base aérea Chkalovsk, en el enclave del mar Báltico. ‘Es una medida adicional de disuasión estratégica’, dice el ejército ruso.

Los aviones rusos de combate con misiles estarán en alerta las 24 horas. (AP)

MOSCÚ.- El ejército ruso informó que ha desplegado aviones de combate armados con misiles hipersónicos de última generación en la región báltica más occidental del país, una medida que se produce en medio de crecientes tensiones con Occidente por las acciones de Moscú en Ucrania.

El Ministerio de Defensa de Rusia informó este jueves, que tres cazas MiG-31 con misiles hipersónicos Kinzhal llegaron a la base aérea Chkalovsk, en el enclave del mar Báltico de Kaliningrado, como parte de “medidas adicionales de disuasión estratégica”.

El Ministerio añadió que los aviones de combate estarán en alerta las 24 horas. Un video publicado por el Ministerio de Defensa mostró a los combatientes llegando a la base, pero sin los misiles, que aparentemente fueron entregados por separado.

Despliegue de misiles Kinzhal en Kaliningrado

El Ministerio de Defensa de Finlandia señaló este jueves que se sospecha que dos aviones de combate rusos MIG-31 violaron el espacio aéreo finlandés en el Golfo de Finlandia frente a la ciudad sureña de Porvoo, al oeste de Helsinki. La Guardia Fronteriza del país nórdico inició una investigación preliminar sobre el incidente.


El despliegue de misiles Kinzhal en Kaliningrado cuando la campaña de Rusia en Ucrania se acerca al sexto mes parecía tener la intención de mostrar la capacidad del ejército ruso de amenazar los activos de la OTAN. La región hace frontera con Polonia y Lituania, países miembros de la OTAN.

Moscú ha criticado duramente las entregas de armas occidentales a Ucrania, acusando a Estados Unidos y sus aliados de avivar el conflicto.

El ejército ruso afirmó que el Kinzhal tiene un alcance de hasta 2 mil kilómetros (alrededor de mil 250 millas) y vuela a 10 veces la velocidad del sonido, por lo que es difícil de interceptar. Rusia ha usado el arma para atacar varios objetivos en Ucrania.

La ubicación de Kaliningrado la ha puesto al frente de los esfuerzos de Moscú para contrarrestar lo que describió como políticas hostiles de la OTAN. El Kremlin ha reforzado metódicamente sus fuerzas militares allí, dotándolas con armas de última generación, entre ellas misiles Iskander guiados con precisión y una variedad de sistemas de defensa aérea.

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