Catorce de las 15 cajas recuperadas a principios de año en la finca del expresidente Donald Trump en Florida contenían documentos clasificados, incluso de nivel ultrasecreto, según una declaración jurada del FBI publicada este viernes donde la agencia explica por qué solicitó a un juez la orden de registro.
El afidávit de 32 páginas, a pesar de que está muy censurada, ofrece la descripción más detallada hasta la fecha de los documentos oficiales que estaban almacenados en la propiedad de Trump en Mar-a-Lago mucho después de que dejó la Casa Blanca y pone de relieve la gravedad de las preocupaciones del gobierno de que los documentos estaban allí ilegalmente.
“El gobierno está llevando a cabo una investigación penal sobre la eliminación y el almacenamiento indebidos de información clasificada en espacios no autorizados, así como la ocultación o eliminación ilegal de registros gubernamentales”, escribió un agente del FBI en la primera página del afidávit al solicitar a un juez la orden para registrar la propiedad de Trump.
¿Qué revela la declaración jurada del FBI que justifica el cateo a residencia de Donald Trump?
El afidávit no proporciona detalles nuevos sobre los 11 conjuntos de documentos clasificados recuperados durante el allanamiento del 8 de agosto en Mar-a-Lago, sino que se refiere a un lote diferente de 15 cajas que la agencia Archivos Nacionales y Administración de Documentos de Estados Unidos recuperó de la casa en enero.
En esas cajas, según la declaración jurada, los funcionarios ubicaron 184 documentos con marcas de estar clasificados, incluidos 25 documentos marcados como ultrasecretos. Los agentes que inspeccionaron las cajas encontraron marcas relacionadas con información proporcionada por fuentes confidenciales, así como información relacionada con la Ley de Vigilancia de Inteligencia Extranjera.
En conjunto, la declaración jurada revela detalles adicionales sobre una investigación penal en curso que ha traído un nuevo peligro legal para Trump justo cuando sienta las bases para otra candidatura presidencial. También muestra con gran detalle el volumen de documentos gubernamentales confidenciales que se almacenaron en Mar-a-Lago en lugar de ser entregados a Archivos Nacionales.
El FBI presentó el documento a un juez para poder obtener una orden de registro en la propiedad de Trump.
Estos afidávits generalmente contienen información vital sobre una investigación y los agentes le explican al juez por qué quieren registrar una propiedad en particular y por qué creen que es probable que encuentren evidencia de un posible delito allí, pero las declaraciones juradas habitualmente permanecen selladas durante las investigaciones en curso. Eso hace que la decisión del juez de revelar partes de ellas sea aún más sorprendente.
En un reconocimiento del extraordinario interés público en la investigación, el juez magistrado federal Bruce Reinhart ordenó el jueves al Departamento que hiciera pública una versión censurada del afidávit para el viernes.
Sin embargo, incluso un afidávit censurado —es decir, con porciones totalmente oscurecidas— puede contener algunas novedades sobre la investigación y es probable que ayude a explicar por qué los agentes federales que intentaron durante meses recuperar documentos confidenciales del gobierno en Mar-a-Lago finalmente se sintieron obligados a solicitar una orden de registro.