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¿El Papa Francisco alista la sucesión? Esto sabemos del nombramiento de 20 cardenales

El Papa Francisco ha nombrado hasta ahora a 83 de los 132 cardenales que son elegibles para sumarse a un cónclave.

El nuevo cardenal Lazzaro You Heung-Sik recibe la biretta de parte del papa Francisco durante el consistorio en la Basílica de San Pedro, en el Vaticano, el 27 de agosto del 2022. (AP Foto/Andrew Medichini) (Andrew Medichini/AP)

El Papa Francisco elevó el sábado 27 de agosto a otros 20 clérigos al rango de cardenal, expandiendo formalmente el grupo de los dignatarios católicos elegibles para votar por su sucesor en caso de fallecimiento o de que renuncie: esto último un paso que él ha dicho que ponderaría si surge la necesidad.

De los sacerdotes nombrados cardenales en la ceremonia en la Basílica de San Pedro, 16 tienen menos de 80 años y, por lo tanto, son elegibles para participar en el cónclave, la asamblea de cardenales que depositan sus boletas para elegir un nuevo pontífice.

Francisco, de 85 años, ha nombrado ahora a 83 de los 132 cardenales actualmente elegibles para sumarse a un cónclave. Los otros fueron nombrados por los dos papas previos, Juan Pablo II y Benedicto XVI, cuyo retiro inesperado en 2013 abrió el camino para el ascenso de Francisco.

Con las ocho hornadas de cardenales que ha nombrado Francisco se fortalecen las posibilidades de que quienquiera que sea elegido como el próximo Papa compartirá su visión para el futuro de la Iglesia católica.

El Papa Francisco les recordó a los cardenales su misión, que según dijo incluye “una apertura a todas las personas, a los horizontes del mundo, a las periferias aún desconocidas”.

Resaltando la atención de Francisco a los marginados de la sociedad, entre los nuevos cardenales está el arzobispo Anthony Poola, de Hyderabad, India. El prelado de 60 años es el primer miembro de la comunidad Dalit, considerada la más baja en el sistema de castas indio, en convertirse en cardenal.


Al escoger al obispo de San Diego Robert Walter McElroy, Francisco pasó por alto a dignatarios eclesiásticos estadounidenses a cargo de diócesis tradicionalmente más prestigiosas, incluso al arzobispo de San Francisco Salvatore Cordileone.

McElroy ha estado entre una minoría de obispos estadounidenses que se opusieron a una campaña para negar la comunión a políticos católicos que respaldaron el derecho al aborto.

Francisco visita tumba del primer Papa que renunció

En un peregrinaje a un poblado en las montañas de Italia, Francisco elogió el domingo a un Papa del siglo XIII que renunció para dedicarse a una vida de ermitaño.

Francisco fue a L’Aquila en los montes Apeninos, afectada por un terremoto en el 2009 en el que murieron 305 personas.

El Papa buscó impulsar la tradición veraniega iniciada por Celestino V hace 728 años, de animar a los fieles a pedir perdón por sus pecados.

La Basílica de Collemaggio en L’Aquila contiene los restos de Celestino, quien abdicó en 1294 después de solo unos meses como sumo pontífice.

Celestino inició la costumbre cada agosto de pasar por la Santa Puerta de la basílica. Tras cumplir con ciertos requerimientos religiosos, los fieles pueden recibir una indulgencia plenaria, que les libra de todo castigo por pecados.

“Los humildes aparecen a los ojos del hombre como débiles y perdedores, pero en realidad son los verdaderos ganadores porque son los únicos que confían totalmente en el Señor y conocen su Voluntad”, declaró Francisco.

“La humildad no consiste en devaluarse sino en el realismo saludable de reconocer nuestro potencial pero también nuestra miseria”, añadió Francisco.

Alabó al “valiente” Celestino porque “ningún poder pudo encarcelarlo o limitarlo”.

Francisco, quien sufre de un problema de las rodillas, fue llevado en silla de ruedas a las puertas austeras de la basílica. Cuando le ayudaron al pontífice a pararse, usó una gruesa rama de olivo para golpear tres veces al portón, que seguidamente se abrió. El papa subió una rampa para entrar a la basílica y rezó en silencio frente al mausoleo donde están los restos de Celestino.

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