En octubre, el Instituto de Arte de Detroit (DIA, por sus siglas en inglés) abrió las cortinas de su exposición de tres meses sobre Van Gogh, presumiendo con orgullo que su muestra de 74 cuadros era una de las mayores colecciones jamás reunidas de las famosas obras del maestro holandés. Ahora, un coleccionista afirma que le robaron una de ellas.
El coleccionista de arte brasileño Gustavo Soter presentó una demanda en un tribunal federal el 10 de enero alegando que el cuadro de 1888 “une liseuse de romans”, o “una lectora de novelas”, le fue robado después de que lo comprara en 2017 por 3.7 millones de dólares y que ha estado a la caza de él desde entonces. Soter afirma que el cuadro vale ahora 5 millones de dólares y quiere que el tribunal obligue al museo a entregárselo lo antes posible y le pague por daños y costos.
La demanda supone un giro decepcionante para el DIA, cuyo personal consiguió reunir docenas de cuadros para exponer además de los seis que el museo ya poseía. Fue un golpe para el instituto, que fue el primer museo estadounidense en adquirir un Van Gogh cuando compró un autorretrato en 1922 por 4 mil 200 dólares.
El juez ordenó que el cuadro no saliera del DIA. Una audiencia está prevista para el 19 de enero.
Soter, cuya empresa Brokerarte Capital Partners presentó la demanda, dijo en los documentos que adquirió el cuadro y luego transfirió casi de inmediato la obra, pero no el título, a un tercero. A continuación, el cuadro desapareció.
Los documentos no decían quién era el tercero ni por qué se le entregó el cuadro a esa persona. El abogado de Soter, Aaron Phelps, no devolvió las llamadas telefónicas en busca de comentarios.
La portavoz del DIA, Megan Hawthorne, dijo: “No se ha alegado mala conducta por parte del DIA, y no se ha solicitado ni ordenado ninguna modificación de la exposición. El DIA seguirá actuando de acuerdo con todas las leyes aplicables y las mejores prácticas”.
También dijo que el cuadro supuestamente robado no formaba parte de la colección interna del DIA y que fue tomado prestado de otra colección para la exposición. El cartel junto al cuadro dice que fue donado por un coleccionista privado de Sao Paulo.
“El préstamo fue aceptado de acuerdo con las mejores prácticas y está sujeto a la protección de la legislación federal aplicable mediante su registro en el Departamento de Estado de Estados Unidos” dijo Hawthorne en un comunicado.
La exposición de Van Gigh, inaugurada el 2 de octubre y que cierra el 22 de enero, ha atraído a 174 mil visitantes.