La inflación británica subió en febrero por primera vez en cuatro meses, lo que tomó por sorpresa a los analistas y aumentaba la presión sobre el Banco de Inglaterra para que subiera las tasas de interés en su reunión del jueves.
El índice de precios al consumo subió al 10.4 por ciento en los 12 meses hasta febrero, en comparación con el 10.1 por ciento del mes anterior, mientras los precios de la energía seguían castigando los presupuestos de los hogares, según indicó el miércoles la Oficina de Estadísticas Nacionales.
Aunque los economistas esperan que los precios caigan de forma rápida este año, la inflación es cinco veces más alta que el objetivo del 2 por ciento del Banco de Inglaterra.
El banco central valorará la necesidad de controlar la inflación, teniendo en cuenta las preocupaciones sobre el efecto de los recientes problemas bancarios globales, cuando decida el jueves si sube las tasas de interés. El banco ha autorizado 10 subidas consecutivas desde diciembre de 2021, lo que ha llevado la tasa bancaria de referencia al 4 por ciento.
¿Cuáles son los productos afectados por la inflación?
Michael Hewson, analista jefe en CMC Markets UK, dijo que esperaba que el Banco de Inglaterra subiera las tasas de interés al menos un cuarto de punto porcentual.
“Una tasa básica del 4 por ciento apenas parece adecuada para actuar como freno con este nivel de subidas de precios, y seguirán aumentando la presión sobre el Banco de Inglaterra” para que suba las tasas el jueves, según dijo Hewson en una nota a los clientes enviada antes de que se conocieran las cifras de inflación.
El alza obedece a un incremento en los precios de alimentos y bebidas no alcohólicas, a lo cual se suman las verduras debido al mal tiempo en Europa.