Los vecindarios del noreste de París han batallado durante años con el flagelo de la cocaína crack y su uso en público. Los Juegos Olímpicos de verano, que arrancarán en poco menos de un año, traen consigo un ímpetu para enfrentar el problema.
Sin embargo, a pesar del incremento en los arrestos y las promesas renovadas de un endurecimiento en la seguridad para los olímpicos de 2024, algunos residentes cuestionan si el nuevo enfoque sólo está orillando a los usuarios a irse a otra parte, en lugar de atender los problemas médicos y de salud mental, la falta de vivienda y empleos, y otros males más profundos que se encuentran en la raíz de la crisis del uso de crack.
Desde hace tiempo, los habitantes de los distritos 18 y 19 de la capital francesa se han quejado por el uso de esa droga al aire libre en sus vecindarios, el cual contrasta agudamente con las cuidadas áreas turísticas de París más hacia el sur.
Recientemente fue posible ver a pequeños grupos de personas usando drogas ilícitas en la estación Porte de la Chapelle del metro y en una parada cercana de tranvía, ubicada al otro lado de la calle de un nuevo estadio multiusos en el que se llevarán a cabo los competencias de bádminton y gimnasia rítmica durante los Juegos Olímpicos de 2024. Escenas similares ocurren a lo largo de las riberas locales y parques públicos.
El año pasado, la policía desalojó un amplio campamento de usuarios de narcóticos en la plaza Forceval, justo enfrente de un enorme parque en el que se presenta la Filarmónica de París y que también alberga otros espacios culturales. Desde entonces, la policía ha llevado a cabo un operativo masivo para prevenir que más de ellos se reúnan allí, emplazando a hasta 600 agentes diarios tan sólo en la parte nororiental de la ciudad.
El jefe de la policía parisina, Laurent Nuñez, se comprometió tras asumir el puesto en 2022 a erradicar el crack de las calles antes de los Juegos Olímpicos. Recientemente declaró que sus labores al respecto eran un éxito.
La policía ha arrestado a 255 personas por vender cocaína crack en París en lo que va del año, señaló Nuñez, en comparación con 285 en todo 2022. La fiscal de París, Laure Beccuau, dijo que, en promedio, cada día dos personas eran presentadas ante la justicia por cargos relacionados con el consumo y la venta de crack este año.
Aunque los residentes locales ven con buenos ojos el que las autoridades presten atención al problema, algunos dicen que el número de usuarios no necesariamente ha disminuido, sino que más bien se han dispersado.
“Si el jefe de la policía se felicita a sí mismo, es porque no ha habido nuevos campamentos”, dijo Frédéric Francelle, portavoz de Collectif19, una asociación de residentes del 19 distrito que piden se acabe con el uso de drogas en las calles. “Pero aún hay sitios donde se consumen abiertamente”.
Francelle dijo que, aunque el enfoque actual de la ciudad parece ser la seguridad, los consumidores de narcóticos necesitan ayuda médica y social.
“Dudamos que realmente estén intentando darles tratamiento antes de que comiencen las Olimpiadas”, declaró Francelle. “Simplemente los presionarán para que se vayan a otra parte. Procurarán llevárselos a las provincias o a los suburbios”.
El mes pasado, un centro de tratamiento para drogadictos ubicado frente al nuevo estadio olímpico fue trasladado a unas cuadras de distancia. Es operado por dos asociaciones comunitarias, Gaïa-Paris y Aurore.
Los trabajadores del centro dicen que el número de visitantes se disparó en 30 por ciento después de que la policía despejó la plaza Forceval, pero en semanas recientes ha vuelto a disminuir, a aproximadamente 150 personas al día.
Las autoridades locales les han solicitado a las asociaciones que contraten a más personas, abran sus puertas más temprano y las cierren más tarde, según Victor Deprez, subdirector de Gaïa-Paris.
“La idea es ampliar nuestras capacidades”, declaró Deprez. “De cierta forma, su solicitud es que estas personas no estén visibles en las calles durante el día”.
Además, se está trabajando para incrementar el número de camas de hospital disponibles para usuarios de crack en la región de París, un aumento con relación a las 39 disponibles actualmente en cinco sitios a 50 para septiembre, dijo Amélie Verdier, jefa de la agencia estatal de salud de la región de París. No pudo proporcionar un estimado del número de consumidores de crack en la capital francesa en la actualidad, aunque cálculos del pasado señalaban que la cifra era de varios miles.
Incrementarán vigilancia durante los Olímpicos
Nuñez, el jefe policial, dijo que la presencia de la policía en los alrededores del nuevo estadio y otros sitios de la ciudad se incrementará “cinco o 10 veces más” durante las Olimpiadas.
El estadio es una de pocas instalaciones que están siendo construidas para los Juegos Olímpicos de París, todas ellas en vecindarios desfavorecidos y habitados por personas de diversas etnias, con el fin de darles a esas áreas un impulso económico. Las instalaciones también serán utilizadas en los Juegos Paralímpicos y posteriormente se entregarán a clubes y escuelas locales.
“Las olimpiadas son una oportunidad para hacernos preguntas sobre las personas que siguen en las calles”, declaró Jamel Lazic, que supervisa cuartos para el consumo de narcóticos en Gaïa-Paris, con los cuales se pretende que los adictos corran menos riesgos y prepararlos para recibir tratamiento. “Tal vez serán una oportunidad para intentar hacer frente al problema y abrir instalaciones en gran escala que puedan alojar a estas personas, y tener una estrategia mejor. ¿Por qué no?”