Resulta que administrar las finanzas del principal activo de la persona más rica del mundo puede ser una tarea muy lucrativa, al menos eso es lo que vivió el exCFO de Tesla.
Zachary Kirkhorn, quien renunció como director financiero de Tesla este lunes 7 de agosto, acumuló un patrimonio neto de 590 millones de dólares durante su período de cuatro años en el cargo, según datos compilados por Bloomberg. El número se compone principalmente de acciones y opciones de Tesla que recibió como compensación.
Aun así, la fortuna acumulada por el designado “maestro de la moneda” saliente del fabricante de automóviles palidece en comparación con la de su director ejecutivo, Elon Musk, cuyo patrimonio neto de 230 mil 600 millones de dólares es el más grande del mundo, según el Índice de multimillonarios de Bloomberg.
Kirkhorn y otros ejecutivos de Tesla no fueron incluidos en el enorme paquete salarial que la junta de la empresa otorgó a Musk en 2018, lo que aceleró su trayectoria a la cima de las clasificaciones de riqueza mundial.
Aparte de un lote de opciones, que tienen un valor neto de alrededor de 550 millones de dólares, la compensación de Kirkhorn fue comparativamente modesta: 300 mil dólares en salario base correspondiente al año pasado y 31 mil 99 dólares en tiempo libre pagado previamente acumulado que se aplicó para a la compra de un Tesla, según la presentación más reciente de la empresa.
No está claro qué hará Kirkhorn a continuación. El ingeniero educado en Harvard y en la Universidad de Pensilvania, que tiene poco más de 30 años, ha trabajado para Musk en Tesla desde 2010 y era considerado por los analistas como un contrapunto tranquilo y mesurado a su grandilocuente jefe en las llamadas de resultados. Antes de incorporarse a la empresa automovilística, trabajó como analista en McKinsey & Co. y realizó prácticas en Microsoft.