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EU teme que la Corte Internacional arreste a funcionarios de Israel por la guerra en Gaza

Los aliados de Israel, entre ellos EU, se han preocupado de que la CPI pueda ordenar la detención del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu y otros por la destrucción en Gaza.

A Estados Unidos y sus aliados les preocupa que la Corte Penal Internacional (CPI) pueda emitir órdenes de arresto contra funcionarios israelíes justo cuando el país se está acercando a un acuerdo de alto el fuego con Hamás, lo que podría poner en peligro el acuerdo, dijeron personas familiarizadas con el asunto.

La preocupación es que Israel se retracte de una tregua si la CPI procede con las órdenes, según dos de las personas, que pidieron no ser identificadas porque se trata de deliberaciones privadas. Las naciones del Grupo de los Siete han iniciado un esfuerzo diplomático silencioso para transmitir ese mensaje al tribunal con sede en La Haya, dijeron las personas.

La CPI está sopesando órdenes de arresto dirigidas tanto a altos funcionarios israelíes como a los líderes de Hamás por la conducta de ambas partes en la guerra en Gaza, dijeron las personas. El New York Times informó anteriormente que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, podría estar entre los señalados.

Dos de las personas dijeron que la brecha entre Israel y Hamás sobre un acuerdo para liberar a los rehenes se había reducido en las últimas semanas y que ahora estaba cerca de llegar a un acuerdo. Hamás está designado como organización terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea.

“Hemos sido muy claros acerca de la investigación de la CPI: no la apoyamos”, dijo el lunes a los periodistas la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre. “No creemos que tengan la jurisdicción”.

Las posibles órdenes de arresto se han convertido en una gran preocupación para Israel y el país está hablando con socios internacionales al respecto, dijo una persona. Otro dijo que Netanyahu le había pedido ayuda a Biden en una conversación el domingo para asegurarse de que no se emitieran las órdenes. Axios informó esa solicitud el lunes temprano.


Un portavoz de la CPI declinó hacer comentarios.

El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, instó a los líderes del grupo militante a llegar rápidamente a una decisión sobre las condiciones israelíes para un alto el fuego temporal. Israel ha sido “extraordinariamente generoso” con las propuestas hechas durante las conversaciones mediadas por Qatar y Egipto para asegurar la liberación de los rehenes israelíes retenidos por Hamás, dijo Blinken en un evento especial del Foro Económico Mundial en Riad el lunes.

“Los ojos del mundo deberían estar puestos en Hamás diciendo ‘acepten este acuerdo’”, dijo el Secretario de Asuntos Exteriores del Reino Unido, David Cameron, en la reunión. “Estamos en un lugar potencialmente mejor que el que hemos estado durante un tiempo”.

El New York Times informó el lunes que Israel está dispuesto a aceptar la liberación de 33 rehenes, frente a al menos 40, durante la primera fase de una nueva tregua. Hamás ha dicho que no puede liberar a 40 mujeres, ancianos o enfermos cautivos como se exige a cambio de un alto el fuego de seis semanas porque no tiene suficientes rehenes en esa categoría.

Los aliados del Grupo de los Siete han estado presionando a Israel para que posponga una incursión en Rafah, donde se han refugiado más de un millón de personas palestinas luego de que fuera nombrada como “zona segura” por el propio Israel. Un acuerdo podría ayudar a poner fin a los combates en Gaza y posponer el asalto a la ciudad, dijo una de las personas.

El 7 de octubre, Hamás atacó a Israel en ataques sorpresa, matando a más de 1mil 200 personas y tomando alrededor de 250 como rehenes. Durante los ataques de represalia de Israel, más de 34 mil personas palestinas han sido asesinadas, según el Ministerio de Salud de Gaza. Estados Unidos y otras naciones del G-7 han instado repetidamente a Netanyahu a hacer más para proteger a los civiles en Gaza, sin dejar de ser aliados y proveedores de armas incondicionales.

Estados Unidos nunca ha sido parte de la CPI, que comenzó su trabajo en 2002 como “tribunal de último recurso” para las víctimas de genocidio, crímenes de guerra y otras atrocidades. El presidente Joe Biden revocó las sanciones impuestas al tribunal durante la administración Trump y ha cooperado en algunos casos, especialmente en torno a acusaciones de crímenes de guerra rusos en Ucrania.

El fiscal jefe del tribunal, Karim Khan, dijo en febrero que estaba profundamente preocupado por la conducta de las fuerzas israelíes, así como de los combatientes de Hamás que mantienen rehenes israelíes. “Quienes no cumplan con la ley no deberían quejarse más adelante, cuando mi oficina tome medidas de conformidad con su mandato”, dijo en ese momento.

La CPI trabaja separadamente de la Corte Internacional de Justicia, el principal órgano judicial de la ONU, que no puede juzgar ni castigar a individuos. Ese tribunal dictaminó en enero que Israel debe actuar para evitar que los palestinos sean asesinados o heridos en respuesta a un caso de genocidio presentado por Sudáfrica.

El ministro de Asuntos Exteriores israelí, Israel Katz, instruyó el domingo a todas las misiones de su país en todo el mundo a prepararse para una ola de antisemitismo, brotes antijudíos y antiisraelíes, tras los informes sobre posibles órdenes de arresto. Dijo que emitir las órdenes perjudicaría a las fuerzas de Israel y “proporcionaría un impulso moral a la organización terrorista Hamas y al eje del Islam radical liderado por Irán contra el cual estamos luchando”.

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