El presidente Joe Biden defendió el derecho de los estudiantes estadounidenses a protestar en contra de la guerra entre Israel y Hamás, pero consideró que se deben realizar de manera pacífica ya que esto permitirá que “el orden prevalezca”.
“Hay derecho a protestar, pero no derecho a causar caos”, dijo Biden en la Casa Blanca.
“El vandalismo, la entrada ilegal, romper ventanas, cerrar campus, forzar la cancelación de calases y graduaciones, nada de esto es una protesta pacífica”, añadió.
El mandatario estadounidense consideró que las protestas lo han llevado a analizar su enfoque de la guerra. Sin embargo, esta situación podría representar una amenaza para su reelección.
Los enfrentamientos han puesto de relieve el creciente descontento entre los progresistas, los jóvenes y los musulmanes y árabes estadounidenses sobre la guerra, y la profunda grieta dentro del propio partido demócrata sobre su manejo del problema. Incluso la guerra entre Israel y Hamas en Gaza se ha convertido en un lastre para la posición política de Biden, ya que lo expone a ataques de ambos lados y con encuestas que muestran que los votantes están perdiendo la confianza en su enfoque.
Hasta ahora los campamentos propalestinos se han extendido a al menos 100 universidades en 30 estados y Washington, DC, desde que los manifestantes erigieron por primera vez tiendas de campaña en el patio de Columbia el 17 de abril.
Incluso el presidente Biden trató de encontrar un equilibrio entre lo que dijo que eran “dos principios estadounidenses fundamentales”, el derecho a la libertad de expresión y “el estado de derecho”.
“Ambos deben ser defendidos. No somos una nación autoritaria en la que silenciamos a la gente o aplastamos la disidencia. Pero tampoco somos un país sin ley. Somos una sociedad civil y el orden debe prevalecer”, mencionó.
Al ser cuestionado sobre si la Guardia Nacional debería intervenir como algunos republicanos han sugerido, Biden dijo “no”. También se lanzó contra la intimidación antisemita, contra los estudiantes judíos o las amenazas contra los musulmanes.
“No debería haber lugar en ningún campus, ni lugar en Estados Unidos para el antisemitismo o las amenazas de violencia contra los estudiantes judíos”, indicó.
“No hay lugar para el discurso de odio o la violencia de ningún tipo, ya sea antisemitismo, islamofobia o discriminación contra los árabes estadounidenses o los estadounidenses palestinos”, agregó.
La represión de la policía en EU
Los administradores universitarios han luchado por abordar las protestas, enfrentándose a las críticas de donantes y políticos de ambos lados del debate. Algunos consideran que la represión policiaca es una respuesta de mano dura a los jóvenes activistas y otros acusan a las escuelas de hacer la vista gorda a los estudiantes judíos que dicen que están siendo amenazados por la intimidación antisemita.
Las protestas en los campus de Estados Unidos se han intensificado en las últimas semanas, esto en solidaridad con los estudiantes de la Universidad de Columbia que fueron arrestados después de construir un campamento que, según los administradores, rompió múltiples políticas escolares e intimidó a los estudiantes judíos.
Evidentemente esto no intimido a los manifestantes, ya que incluso se arriesgaron a la expulsión para atrincherarse en un edificio. Sin embargo, el movimiento terminó en una redada policial el martes por la noche y el arresto de 119 personas.
Por su parte, el alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, señaló que los estudiantes han sido influenciados por “agitadores externos profesionales” para volverse cada vez más violentos. También la policía ha estado preocupada por una “integración de la retórica” asociada con el terrorismo, así lo explicó la comisionada adjunta Rebecca Weiner para la inteligencia y la lucha contra el terrorismo a los periodistas.
Las protestas han sido un desafío personal para Biden, ya que tendrá que convencer a los votantes jóvenes y progresistas consternados por su apoyo a Israel para reforzar sus posibilidades en la revancha de las elecciones generales de noviembre con el republicano Donald Trump.
Además, los republicanos se han apoderado de las imágenes para criticar a Biden y pintar una imagen de una nación que dicen que ha visto crecer la anarquía y el desorden bajo su administración. Incluso la noche del pasado martes, Trump llamó a Fox News cuando la policía entró en el campus de Columbia, diciendo que Biden había erosionado el apoyo bipartidista a Israel.
Por ahora Biden ha estado presionando a Israel y Hamas para que acuerden un alto el fuego, un primer paso hacia la resolución de su conflicto, y para que más ayuda entre en Gaza para aliviar la crisis humanitaria, medidas que podrían ayudar a abordar la reacción política interna.
Israel ha librado una guerra de casi siete meses, después de que Hamas, un grupo designado como organización terrorista por los Estados Unidos y la Unión Europea, lanzara un ataque que mató a mil 200 personas. Mientras que las autoridades de Gaza, administrada por Hamas, dicen que más de 34 mil palestinos han sido asesinados.