La policía desalojó un campamento propalestino en la Universidad George Washington este miércoles y arrestó a manifestantes, horas después de que decenas marcharon hacia la casa de la presidenta de la institución mientras funcionarios de la ciudad se preparan para comparecer ante el Congreso sobre la respuesta a las manifestaciones.
La Comisión de Supervisión y Responsabilidad de la Cámara de Representantes canceló la audiencia después de la medida policial, y su titular y otros republicanos aplaudieron la gestión.
El líder de la cámara baja, el republicano Mike Johnson, declaró “no debe requerir la amenaza de convocar a la alcaldesa de la capital ante el Congreso para proteger a los estudiantes judíos de la Universidad George Washington”.
La alcaldesa de Washington D.C., Muriel Bowser, y la jefa del Departamento de Policía Metropolitana del Distrito de Columbia, Pamela Smith, habían sido llamadas a testificar ante la comisión liderada por los republicanos.
También el martes en la noche, la policía llegó para despejar el acampado en la Universidad de Massachusetts. Video del lugar en Amherst muestra el operativo de varias horas, en que docenas de policías antimotines sistemáticamente desmontaban carpas y detenían a manifestantes. El operativo duró hasta la madrugada del miércoles. La policía informó que unas 130 personas fueron arrestadas luego que los inconformes se negaron a dispersarse.
En la ciudad de Nueva York, la policía arrestó a 50 personas afuera del Fashion Institute of Technology (Instituto de Tecnología de Modas) el martes en la noche, luego que unos manifestantes que protestaban cerca llegaron para apoyar al acampado estudiantil.
Las tensiones han aumentado en los enfrentamientos con los estudiantes que protestan contra la guerra entre Israel y Hamás en las universidades de todo Estados Unidos y, cada vez más, en Europa. Algunas instituciones tomaron medidas enérgicas inmediatamente. Otras han tolerado las manifestaciones. Algunas han comenzado a perder la paciencia y a llamar a la policía por preocupaciones sobre perturbaciones en la vida y la seguridad del campus.
Policías lanzan gas pimienta a manifestantes propalestinos
La policía del Distrito de Columbia indicó que los agentes actuaron para dispersar a los manifestantes porque “ha habido una escalada gradual en la volatilidad de la protesta”. Agregó que se realizaron 33 arrestos. Algunos manifestantes fueron rociados con gas pimienta cuando la policía les impidió el acceso al campamento.
La Universidad George Washington había advertido sobre posibles suspensiones de continuar con el campamento en University Yard. Manifestantes que portaban carteles que decían “Palestina libre” y “Manos fuera de Rafah” también marcharon el martes por la noche a la casa de la presidenta Ellen Granberg.
“Si bien la universidad está comprometida a proteger los derechos de los estudiantes a la libre expresión, el campamento se había convertido en una actividad ilegal, y los participantes violaban directamente múltiples políticas universitarias y regulaciones de la ciudad”, decía un comunicado de la escuela. Luego dijo que se habían reanudado las operaciones normales tras “el operativo ordenado y seguro” para despejar a los manifestantes.
Desde el 18 de abril, poco más de 2 mil 600 personas han sido arrestadas en 50 universidades, según cálculos de The Associated Press con base en reportes de universidades y autoridades.
Otras escuelas están permitiendo que los alumnos se organicen como mejor les parezca.
El presidente de la Universidad Wesleyan, una escuela liberal de artes en Connecticut, dijo que la manifestación propalestina en el campus, que incluye tiendas de campaña, es un acto de expresión política. El campamento allí ha crecido de unas 20 tiendas de campaña hace una semana a más de 100.
“La causa de los manifestantes es importante: llamar la atención sobre el asesinato de personas inocentes”, escribió el jueves el presidente de la universidad, Michael Roth, a la comunidad universitaria. “Y continuamos dándoles espacio para que lo hagan, siempre y cuando ese espacio no perturbe las operaciones del campus”.