El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció este domingo que la oposición tiene sicarios en el país, con el propósito de atacarlo en medio de la campaña política que se desarrolla, de cara a las elecciones presidenciales del 28 de julio, en las que buscará un tercer sexenio en el poder.
“Ellos tienen un grupo de sicarios, la ultraderecha (...), tienen un grupo de sicarios ya en Venezuela, buscándome y buscándonos para hacernos daño”, aseguró el mandatario durante un acto con dirigentes del gobernante Partido Socialista Unido (PSUV), en Caracas.
Dijo, sin mostrar pruebas, que detrás de estos planes están los exalcaldes Leopoldo López y Antonio Ledezma, así como el expresidente del Parlamento Julio Borges, los tres actualmente están exiliados y acusados por la Justicia venezolana de conspirar contra el Ejecutivo de Maduro.
Asimismo, responsabilizó por este caso a la líder opositora María Corina Machado, quien realiza una gira política por todo el país promoviendo la candidatura presidencial del exembajador Edmundo González Urrutia, el abanderado de la principal coalición antichavista, la Plataforma Unitaria Democrática (PUD).
La campaña de Maduro, en el misterio
El líder chavista reiteró que, por estas “razones de seguridad”, no anuncia las fechas de sus actos de campaña ni los lugares que visitará, por lo que los simpatizantes que asisten a estos mitines -insistió- se enteran “de sorpresa”.
“Mis llegadas en todos lados tienen que ser de sorpresa, el pueblo cuidándome y los equipos de seguridad haciendo un buen trabajo, como lo están haciendo. En manos de Dios, voy rumbo a los destinos para cumplir mi misión aquí en la Tierra”, sostuvo.
Maduro, que sufrió un atentado con drones en 2018, ha denunciado más de 30 planes para asesinarlo desde que asumió el poder en 2013, siempre vinculados con la oposición, lo que ha dejado a decenas de políticos encarcelados y exiliados.