El 17 de octubre de 2024, la organización médico-humanitaria internacional Médicos Sin Fronteras (MSF), junto con otros activistas de la salud mundial, facilitadores de atención sanitaria y organizaciones de la sociedad civil de la coalición “Time for $5″.
Entregó en mano una petición firmada por 206 mil 937 personas de 194 países a la empresa estadounidense Danaher en su sede mundial en Washington.
Danaher es la empresa matriz del fabricante estadounidense de pruebas médicas Cepheid, y la petición exige que Danaher y Cepheid reduzcan el precio a 5 dólares por todas sus pruebas médicas ‘GeneXpert’ vendidas en países de bajos recursos.
Estas pruebas son de vital importancia para diagnosticar enfermedades como la tuberculosis (TB), el VIH, la hepatitis, las infecciones de transmisión sexual (ITS) y el ébola. Acompañando a la petición, había una carta abierta en la que se pedía a las empresas que respondieran a las demandas y preocupaciones planteadas en la petición antes del 25 de octubre de 2024.
Las pruebas son esenciales. Es el primer paso para diagnosticar a alguien que está enfermo, darle el tratamiento que necesita y prevenir una mayor propagación de enfermedades infecciosas. La prueba médica GeneXpert de Danaher es fundamental para diagnosticar enfermedades en el “punto de atención”, es decir, cerca de donde viven las personas y donde a menudo no hay laboratorio.
“Danaher y Cepheid, es hora de que escuchen a las más de 200 mil personas en todo el mundo que exigen acceso inmediato a pruebas médicas asequibles que salvan vidas para las personas en los países de ingresos bajos y medios”, dijo Mihir Mankad, director de defensa y políticas de salud global de MSF Estados Unidos. “Nuestra investigación muestra que Danaher y Cepheid podrían cobrar 5 dólares por prueba y aún así obtener una ganancia razonable, por lo que es imperdonable que todavía estén cobrando más del triple de ese precio incluso en los países más pobres por la mayoría de las pruebas que producen”.
MSF publicó una investigación en 2019 en la que estimaba que cada prueba GeneXpert producida por Cepheid podría venderse con un beneficio de 5 dólares a los volúmenes de ventas que Cepheid y Danaher alcanzaron hace mucho tiempo.
En respuesta a la presión ejercida por la coalición “Time for $5″ y los activistas contra la tuberculosis en septiembre de 2023, Danaher anunció que reduciría el precio de la prueba primaria utilizada para diagnosticar la tuberculosis de 10 a 8 dólares, lo que supuso un primer paso importante. Según el Fondo Mundial, se espera que esta reducción de precios se traduzca en un ahorro anual de 32 millones de dólares, lo que permitirá la compra de 3,6 millones de pruebas adicionales cada año. Esto significa que muchas más personas con tuberculosis recibirán un diagnóstico y tratamiento oportunos y, en última instancia, se salvarán más vidas.
Sin embargo, Cepheid y Danaher tienen la intención de seguir cobrando entre 15 y 20 dólares por el mismo tipo de prueba que se utiliza para diagnosticar la tuberculosis resistente a los medicamentos (15 dólares), el VIH (15 dólares), la hepatitis (15 dólares), las ITS (16-19 dólares) y el ébola (20 dólares). Estos precios son entre un 200% y un 400% más altos que los 5 dólares que se estima que les costará a Cepheid y Danaher hacer una prueba y aún así poder venderla con una ganancia. Esto es especialmente atroz si se tiene en cuenta que Danaher y Cepheid se beneficiaron de 252 millones de dólares en fondos públicos para desarrollar la tecnología.
En septiembre de 2023, Danaher también se comprometió a realizar una evaluación anual por parte de terceros de lo que les cuesta fabricar las pruebas GeneXpert, una oportunidad importante para demostrar que no estaba aumentando mucho sus precios. Sin embargo, ha pasado más de un año desde esa promesa, y la corporación no ha facilitado información sobre cómo se llevará a cabo la auditoría y quién podrá ver los resultados.
“Ha pasado más de un año desde que Danaher se comprometió a sincerarse sobre lo que les cuesta hacer las pruebas GeneXpert, pero todo lo que tenemos hasta ahora es un silencio ensordecedor por parte de la corporación”, dijo Stijn Deborggraeve, asesor de diagnóstico de la Campaña de Acceso de MSF. “Este silencio se produce incluso después de que publicamos recomendaciones sobre cómo Danaher puede garantizar que la auditoría sea rigurosa y transparente. Y ahora, las personas que necesitan estas pruebas en todo el mundo no pueden esperar más: Danaher debe hacer pública de inmediato la información sobre su auditoría planificada y garantizar un acceso asequible a sus pruebas que salvan vidas”.