El gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dio vía libre este martes 21 de enero a las detenciones de migrantes en lugares previamente considerados “protegidos” como escuelas, iglesias y hospitales.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) revocó una directriz de la Administración de Joe Biden que instruía a las autoridades migratorias a evitar detenciones en estos lugares o cerca a ellos.
El Gobierno alega que la decisión de este martes “empodera” a los agentes de migración a “seguir las leyes” y capturar a los que llaman “criminales extranjeros”, según indicó un portavoz del DHS en un comunicado.
El texto asegura además, sin citar pruebas o ejemplos, que hay “criminales” que se “esconden en las escuelas y las iglesias” de Estados Unidos para evadir ser arrestados.
Trump declara ‘emergencia nacional’ en la frontera con México
En su primer día en la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, declaró el lunes una “emergencia nacional” en la frontera con México y allanó el camino para su promesa de deportaciones masivas de migrantes.
Por medio de varios decretos, que firmó en el Despacho Oval rodeado de cámaras y periodistas, el republicano emitió una serie de órdenes ejecutivas que moldearán su promesa de militarizar la frontera, prohibir la entrada de migrantes y solicitantes de asilo y deportar a los más de 11 millones de personas que viven en Estados Unidos sin un estatus legal.
“No tengo una mayor responsabilidad que la de defender a nuestro país de amenazas e invasiones y eso es exactamente lo que voy a hacer”, señaló durante su primer discurso como líder del país.
¿Por qué declaró ‘emergencia nacional’ en la frontera?
Citando una “emergencia nacional”, autorizó en una extensa orden ejecutiva el uso de las fuerzas militares en la frontera con México para “asegurar” la zona y repeler “formas de invasión”, incluyendo la migración hacia Estados Unidos y el tráfico de drogas.
El documento ordena a las autoridades “deportar inmediatamente” a todos los migrantes que entren de manera irregular en Estados Unidos, indicando que se restaurarán las deportaciones en caliente.
A su vez, restaura el programa conocido como ‘Permanece en México’, vigente durante su primer mandato (2017-2021) y que obligaba a los migrantes a esperar en el país vecino a que sus casos fueran procesados por las autoridades.
Fin del CBP One
El presidente puso también fin a dos programas que fueron creados por su antecesor, Joe Biden (2021-2025), para disuadir la migración irregular: la aplicación móvil CBP One y el permiso humanitario (conocido como ‘parole’) para ciudadanos de Cuba, Nicaragua, Haití y Venezuela.
A través de CBP One, los migrantes que estaban en territorio mexicano podían rellenar un formulario con sus datos y solicitar una cita para presentarse a un puerto de entrada de la frontera sur.
A través de esta aplicación, que empezó a funcionar en enero de 2023, más de 930 mil personas se presentaron para que las autoridades procesaran sus casos, según el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
¿Qué sitios protegían a los migrantes de detenciones?
La directriz que fue revocada fue emitida por el Gobierno de Biden en 2021 y prohibía a los agentes de migración llevar a cabo arrestos o redadas en algunos lugares sin aprobación de un superior.
Entre los “sitios protegidos” se incluía tanto los centros educativos, como de salud, lugares de culto, albergues para víctimas de violencia doméstica, funerales, manifestaciones o centros de ayuda tras un desastre natural.
La idea de la medida, según el memorando de 2021, era evitar que las personas extranjeras se mostraran reacias a asistir a lugares donde se ofrezcan servicios esenciales.
“Podemos cumplir con nuestra misión sin negar o limitar el acceso de los individuos a la comida, el albergue o la fe”, señala ese documento.