¿El famoso cuadro de La Mona Lisa tendrá nueva casa? El Museo del Louvre será sometido a un amplio proyecto de remodelación que incluye la construcción de una nueva entrada en el este para descongestionar el acceso por la pirámide de cristal.
Como parte de estos trabajos, La Mona Lisa será trasladada a una sala separada, explicó Emmanuel Macron, presidente de Francia, este martes 28 de enero.
Con la afluencia actual, la experiencia para ver el cuadro en la denominada Sala de Estado -junto a otras obras maestras como Las bodas de Caná de Paolo Veronese que a su lado casi pasan desapercibidas- resulta demasiado incómoda, como reconocieron Macron y la directora del Louvre, Laurence des Cars.
¿Por qué ‘La Mona Lisa’ tendrá una sala exclusiva?
El nuevo emplazamiento de la obra maestra de Leonardo da Vinci permitirá visitarla “con más tranquilidad”, a la altura de lo que “se merece”, apuntó Macron en una comparecencia ofrecida precisamente en el espacio que ahora alberga La Mona Lisa.
La Gioconda, como también se conoce al famoso cuadro, tendrá un acceso y un billete de entrada separados para manejar a las cerca de 30 mil personas que la visitan al día.
La construcción de la nueva sala vendrá de la mano de una expansión en el flanco este del museo, con salas subterráneas al estilo de las que se encuentran bajo la pirámide de cristal.
Para eso se dotará al Louvre de un nuevo acceso en el patio conocido como Cour Carrée, en la denominada Columnata Perrault.
El Museo del Louvre, en pésimo estado, alertan
El proyecto, que Macron calificó como el “renacimiento del Louvre” y que debería estar finalizado para 2031, servirá para replantear el concepto del museo después de que su directora alertó al Ministerio de Cultura del mal estado y de la obsolescencia del Louvre en una nota filtrada a la prensa cuyo contenido dio la vuelta al mundo.
Y es que 40 años después de la última remodelación del Louvre, que implicó precisamente la construcción de la pirámide de cristal, el museo ha duplicado con creces los 4 millones de visitantes anuales para los que se concibió entonces debido a la explosión del turismo de masas. Solo en 2024, 8.7 millones de personas visitaron las instalaciones.
Énigme :
— Musée du Louvre (@MuseeLouvre) January 28, 2025
Je suis au cœur d’un sourire,
Mystère que l’on vient poursuivre.
Aussi sous des pinceaux de maîtres anciens,
Je garde un secret dans mes liens.
Le Louvre m’offre un écrin d’art,
Qui suis-je, devinez ce mot rare ?
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A la escalada de visitantes -antes de la pandemia de COVID-19 se llegaron a rozar los 10 millones al año, 70 por ciento de ellos extranjeros- se añaden otros nuevos desafíos en materia de seguridad y por el cambio climático.
Esta será el costo del boleto para visitantes que no sean de la Unión Europea
Estas y otras medidas para restaurar las obsoletas instalaciones se financiarán, entre otros instrumentos, con un aumento del precio del billete para los visitantes extracomunitarios, es decir, de países que no pertenecen a la Unión Europea.
Macron no detalló el precio, pero fuentes del Elíseo indicaron a la prensa que el precio del boleto para el Museo de Louvre subirá desde los 22 hasta los 30 euros.
Esos ingresos extra se sumarán a partir de enero de 2026 al alza del 30 por ciento de los precios que ya experimentaron las entradas en 2024, el año de los Juegos Olímpicos de París. También a la financiación obtenida a través de los mecenas y de la explotación de la marca del Louvre y de las instalaciones, por ejemplo, alquilándolas por sumas millonarias para los desfiles de la Semana de la Moda.
El Ministerio de Cultura también cooperará con 10 millones de euros, en un momento en el que el Estado francés no se puede permitir grandes desembolsos ya que con una Asamblea Nacional muy dividida ni siquiera se han aprobado los presupuestos para 2025 que permitan empezar a reducir el elevado déficit francés.
Macron no especificó, en cualquier caso, cuánto costará la remodelación del Louvre, aunque medios locales señalaron, citando fuentes del entorno de la Presidencia, que supondrá una inversión de entre 700 y 800 millones de euros durante la próxima década.
Para 2031, cuando se termine el proyecto del acceso por el este, el Louvre estará en condiciones de dar cabida a 12 millones de visitantes al año, de albergar nuevas iniciativas pedagógicas y de mantenerse como el “epicentro” del arte en Francia y en el mundo.