El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, llegó este martes a Texas para promocionar las secciones completadas del muro en la frontera con México.
Esta es su primera aparición en público desde que alentó a sus simpatizantes que atacaron el Capitolio de EU la semana pasada.
Trump arribó a Alamo, Texas, para exigir avances en el muro inconcluso, en un intento por desviar la atención de las intensas críticas a su comportamiento y resaltar lo que él cree que es uno de sus logros más característicos.
Sin embargo, es poco probable que el viaje eclipse las consecuencias de las protestas violentas en el Capitolio, que dejaron cinco muertos; incrementaron las peticiones de renuncia o expulsión de Trump; provocaron su suspensión definitiva en Twitter; y pusieron en marcha los planes de la Cámara de Representantes de Estados Unidos para llevarlo a juicio político nuevamente. Un sindicato comunitario en el sur de Texas planea organizar una protesta contra la visita del presidente.
Trump se ha negado a dimitir y el vicepresidente de EU, Mike Pence, señaló el lunes que rechazará las demandas de expulsar a Trump de inmediato, ya que los dos se reunieron y acordaron trabajar juntos por el resto del mandato, según un alto funcionario de la administración.
Era la primera vez que Trump y Pence hablaban desde que los partidarios del presidente irrumpieron en el Capitolio mientras Pence presidía el recuento formal de los votos del Colegio Electoral, según dos personas familiarizadas con el asunto.
Trump había exigido que Pence anulara el resultado de las elecciones a su favor, pero el vicepresidente desafió al mandatario, creando una brecha entre los dos políticos.
Con información de AP*