Bélgica aprobó un "buzón" para abandonar bebés de forma anónima, que podrá abrir a principios de octubre en una comunidad de Bruselas llamada Evere.
El diario The Brussels Times reportó que este dispositivo puede volver a estar en uso tras el dictamen del Consejo de Estado después de haber sido prohibido por el entonces alcalde en 2017.
La reapertura de este buzón busca permitir que los padres desesperados dejen a su bebé recién nacido en un lugar seguro, además de supervisado.
El dispositivo -que fue creado por la organización Amberes Moeders voor Moeders (Madres para madres)- consta de un cajón donde se puede dejar al bebé y envía una señal a la asociación civil que lo instaló, de nombre Corvia.
El buzón fue instalado en Evere a principios de 2017. Casi de inmediato, el entonces alcalde, Pierre Muylle, emitió una orden de prohibición, alegando que es ilegal abandonar a los bebés. Pero ahora el dispositivo estará de regreso en esa comunidad.