WASHINGTON, DC.- En un esfuerzo por unir a los demócratas, Joe Biden buscó el apoyo del abanderado del sector progresista Bernie Sanders y de Barack Obama, cuya presidencia es muy criticada por los liberales. Pero la persona que más podría ayudarlo en esa empresa es Michelle Obama, de quien, dijo, le gustaría que fuera su vicepresidenta.
"La elegiría en un instante. Es brillante. Conoce el camino. Es una mujer muy buena. Los Obama son grandes amigos", aseguró Biden a CNN.
La exprimera dama es una figura única en la polarizada política estadounidense: popular entre los demócratas y bien vista incluso por muchos republicanos e independientes.
Al dejar la Casa Blanca tenía un índice de aprobación de 68 por ciento, según la encuestadora Gallup. Y en diciembre fue nombrada "la mujer más admirada del mundo", por segundo año consecutivo, también por Gallup.
Michelle Obama, sin embargo, mencionó hace un año que no estaba interesada en entrar a la política.
"Lo diré aquí directamente: no tengo intención de postularme para un cargo", sostuvo.
Parece poco probable que ella le brinde su apoyo a corto plazo, pero las puertas aún no están cerradas. Agencias