El equipo económico del líder opositor venezolano, Juan Guaidó, trabaja en la creación de un fondo en Estados Unidos para recibir los ingresos por exportaciones petroleras, dijo uno de sus integrantes, tras las nuevas sanciones de Washington contra el GObierno de Nicolás Maduro que complican las ventas de crudo.
Las sanciones buscan impedir que las refinerías estadounidenses paguen en cuentas de la petrolera estatal PDVSA, por lo cual alrededor de una docena de tanqueros con más de 7 millones de barriles de crudo y productos refinados permanecen anclados desde hace días en la costa estadounidense del Golfo de México, según datos de Refinitiv Eikon.
"El dinero del petróleo seguirá entrando al Estado venezolano, pero no podrá ser manejado por Maduro", agregó el diputado Carlos Paparoni, quien encabeza la comisión que se encarga de proteger los activos de Venezuela en el exterior.
El fondo bancario prevé captar tanto los pagos por la venta de petróleo como los que se giren a Citgo, la filial de PDVSA en Estados Unidos, tras el reconocimiento del Gobierno de Donald Trump a Guaidó como presidente interino, explicó Paparoni.
Los trámites "están bastante adelantados", dijo el legislador a Reuters. "Espero que la próxima semana pueda ser anunciado por nuestro representante en Estados Unidos", agregó en referencia a Carlos Vecchio, nombrado por Guaidó como encargado de negocios en Washington.
Los clientes de PDVSA en Estados Unidos típicamente tienen 30 días para pagar desde la fecha de descarga, proceso que se ha retrasado.
Además del fondo para manejar los ingresos, el equipo de Guaidó, quien preside la Asamblea Nacional y ha sido reconocido por la mayoría de los países de Europa y la región, inició contactos con las petroleras socias de PDVSA.
Los socios de la industria estatal en empresas mixtas se habrían mostrado dispuestos a seguir operando en el país bajo un nuevo gobierno, dijo Yon Goicoechea, otro colaborador del líder opositor, quien no detalló las compañías con las cuales se han realizado las conversaciones.
Goicoechea agregó que también preparan un plan de emergencia para el suministro interno de gasolina una vez que logren un cambio político, parte de un programa para el sector petrolero que contempla el control operativo de la industria y la preservación de activos.
Como parte del plan, el equipo de Guaidó ha acordado con el Gobierno de Colombia la congelación de fondos de Monómeros, una compañía filial de la petroquímica estatal venezolana Pequiven en Colombia.
La producción petrolera de Venezuela ha caído a mínimos de 70 años por la merma de las inversiones y la falta de personal calificado, entre otras razones, lo que se ha reflejado en problemas de abastecimiento de combustible.
También se han sostenido conversaciones con los acreedores de PDVSA, a quienes les han manifestado que se "renegociarán las deudas", apuntó Goicoechea.
La República y la petrolera deben unos 8 mil millones de dólares a los tenedores de sus títulos, después de que el Gobierno de Maduro dejó de cancelar los intereses de los bonos a fines de 2017.
Sobre China y Rusia, que apoyan a Maduro, Goicoechea dijo que se busca mantener las inversiones y no descartó gestionar financiamiento del gigante asiático. La semana pasada, el líder opositor dijo que a las dos potencias les convenía un cambio de gobierno.