España dejó a los niños jugar al aire libre el domingo por primera vez en seis semanas, parte de las iniciativas en varios países europeos para reducir sus confinamientos y reabrir sus economías vapuleadas por la pandemia del coronavirus.
En otras partes del mundo, los hospitales en la ciudad china de Wuhan, donde estalló el desastre, ya no tienen ningún paciente con la enfermedad COVID-19, informaron medios estatales, después de una crisis en la que esa urbe registró casi 3 mil 900 muertes.
Y el primer ministro británico Boris Johnson planea regresar a trabajar el lunes al número 10 de Downing Street luego de que contrajo el coronavirus y fue a dar a una unidad de terapia intensiva.
En Estados Unidos los gobernadores se movían a diferentes velocidades en la reapertura: algunos con mayor agresividad y otros con más cautela.
Los de estados muy afectados como Nueva York y Michigan mantuvieron en vigor las órdenes de permanecer en casa hasta por lo menos mediados de mayo, mientras que sus homólogos de Georgia, Oklahoma y Alaska están permitiendo que algunos negocios reanuden sus actividades. Y las iglesias en Montana volvieron a tener servicios presenciales el domingo.
La cifra oficial de muertes por el coronavirus superó las 200 mil a nivel internacional, con más de 2.9 millones de casos confirmados, de acuerdo con datos de la Universidad Johns Hopkins, aunque se cree que las cifras reales son mucho mayores, en parte debido a que no hay pruebas suficientes y a las diferencias en el conteo de muertos en cada país.
En Italia, Gran Bretaña, España y Francia han fallecido más de 20 mil personas por país, mientras que Estados Unidos tiene alrededor de 55 mil muertos.
Hubo algunas señales esperanzadoras: Italia registró su menor número de decesos en 24 horas desde mediados de marzo, con 260, y el estado de Nueva York tuvo su cifra más pequeña desde el mes pasado, con 367.
Después de siete semanas de un estricto confinamiento, el primer ministro italiano Giuseppe Conte trazó un ansiado calendario para regresar a la normalidad, anunciando que fábricas, sitios en construcción y empresas de suministro al por mayor pueden reanudar sus actividades tan pronto como adopten medidas de seguridad para combatir el virus.
Conte también dijo que a partir del 4 de mayo los parques y jardines reabrirán, se permitirán los funerales, los atletas podrán reanudar sus entrenamientos y la gente podrá visitar a familiares que vivan en la misma región. Si todo va bien, las tiendas y museos reabrirán el 18 de mayo y los restaurantes, cafeterías y salones el 1 de junio, informó el primer ministro.
Pero advirtió que si la gente no porta mascarillas y no obedece las reglas de distanciamiento social, "la curva de contagio puede volver a subir, se saldrá de control, las muertes aumentarán y tendremos un daño irreparable" a la economía.
En España, donde la crisis también está disminuyendo, las calles volvieron a tener ruido con los niños gritando y el traqueteo de las bicicletas luego de que las autoridades españolas permitieron que los menores de 14 años salieran de sus casas con un padre de familia para jugar durante una hora.
"¡Estoy en la gloria! ¡Por favor! ¡Seis semanas! No me lo podía creer", dijo Susana Sabaté, madre de gemelos de 3 años, en Barcelona. "Son niños muy movidos. Hoy cuando han visto la puerta de la casa, los patinetes, se han emocionado".
El presidente del gobierno español Pedro Sánchez presentará un plan detallado el martes para la "disminución" del confinamiento de España y dijo que la precaución máxima será la guía para la reducción de las medidas implementadas. Su homólogo francés dijo que dará a conocer una "estrategia nacional de desconfinamiento" el mismo día.
En Estados Unidos, donde el presidente Donald Trump ha presionado en varias ocasiones para reabrir los negocios del país y los estados han estado actuando en forma dispar, el gobernador de Oklahoma Kevin Stitt comentó a la cadena Fox News que las hospitalizaciones están disminuyendo en la entidad, por lo que reabrirá las iglesias y los restaurantes el viernes, con directrices para que mantengan el distanciamiento social.
Del otro lado del océano Atlántico, Johnson enfrenta solicitudes para que sea más claro sobre cuándo su gobierno reducirá el confinamiento, que por lo pronto continuará hasta el 7 de mayo.
Otras naciones europeas van más adelantadas en la reducción de sus restricciones. Alemania permitió que las tiendas no esenciales y otras instalaciones abrieran la semana pasada, y Dinamarca reanudó las clases para los niños de hasta quinto grado.
En China, las autoridades de Wuhan indicaron que todos los proyectos grandes de construcción se han reanudado y que están impulsando la reapertura de las fábricas y de otras actividades económicas después de un confinamiento de dos meses y medio.