Los fiscales federales de Nueva York solicitaron formalmente el testimonio del príncipe Andrés, a través del Gobierno de Reino Unido, como parte de la investigación sobre los implicados en la red de tráfico sexual de menores de Jeffrey Epstein.
Así lo informaron los principales medios estadounidenses la víspera. La solicitud se hizo mediante un tratado de Asistencia Legal Mutua al Ministerio del Interior Británico. El Departamento de Justicia pidió ayuda de Reino Unido para convencer al príncipe, hijo de Isabel II, para dar su testimonio.
De acuerdo con ABC News, el príncipe Andrés es un testigo y no es objetivo de la investigación sobre la red de pederastia atribuida al financiero Epstein, quien se suicidó en 2019 mientras aguardaba su juicio. Epstein fue cercano a figuras políticas importantes, como Bill Clinton, Donald Trump y Andrés de York.
El príncipe Andrés ha negado en repetidas ocasiones haber tenido cualquier participación en las actividades criminales del multimillonario Epstein. En una criticada entrevista a la BBC en noviembre de 2019, el príncipe dijo que se había beneficiado de su amistad con Epstein, por lo cual no se arrepentía de la misma.
Después del escándalo suscitado por las declaraciones, Andrés de York anunció el abandono de sus deberes reales ese mismo noviembre y se retiró de la vida pública. Dijo que el caso se había convertido en una interrupción importante para la familia real.
La noticia sobre la solicitud formal del testimonio de Andrés ocurre de manera paralela a un resurgimiento sobre el tema en la agenda pública, tras las acusaciones de un grupo autoidentificado como Anonymous sobre la supuesta implicación del presidente Trump en la muerte de Epstein para encubrir crímenes sexuales