JERUSALÉN.- En un contraste marcado, Israel pasó el miércoles de la reflexión melancólica para recordar a los soldados caídos y víctimas del terrorismo a jubilosas celebraciones por el Día de la Independencia en conmemoración del 68vo aniversario de la fundación del Estado judío.
La combinación del sobrio Día de los Caídos en las Guerras con las celebraciones del Día de la Independencia es intencional, para mostrar el vínculo entre las costosas guerras peleadas por Israel y el establecimiento y supervivencia del Estado judío.
En una ceremonia para conmemorar el duelo colectivo e iniciar las celebraciones, 14 israelíes recibieron el honor de encender antorchas en Monte Hertzl, en Jerusalén, el cementerio nacional de Israel.
El primer ministro Benjamin Netanyahu habló a la nación en un breve discurso transmitido en la ceremonia.
"Uno de los requisitos fundamentales para la independencia es la voluntad de luchar por ella, pero eso tiene un precio doloroso: nuestros hijos e hijas, hermanos y hermanas caídos", dijo Netanyahu. "Les debemos todo. Sabemos que no podemos existir sin una fuerza de defensa, no podemos mantener nuestra independencia si no nos fortalecemos".
Las celebraciones continuarán el jueves, con comidas tradicionales al aire libre, vuelos de aviones de la fuerza aérea y otras festividades.