Israel reabrió este domingo la mayor parte de su economía dentro de la fase final para retirar las restricciones contra el coronavirus, algunas de las cuales llevan activas desde septiembre.
La apertura llega tras meses de cierres impuestos por el gobierno y a menos de tres semanas para las cuartas elecciones parlamentarias del país en dos años. Israel, líder mundial en vacunaciones por persona, ha inmunizado casi al 40 por ciento de su población en apenas dos meses.
Bares y restaurantes, salas de fiestas, eventos deportivos, hoteles y escuelas primarias y secundarias pudieron reabrir después de meses con algunas restricciones de aforo, y en algunos lugares sólo a personas vacunadas.
El gobierno del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, autorizó el levantamiento de las restricciones el sábado por la noche. Eso incluyó la reapertura del principal aeropuerto internacional a un número limitado de pasajeros diarios.
Netanyahu se presenta a la reelección como campeón de la vacunación contra el coronavirus, al mismo tiempo que se celebra su juicio por corrupción.
Israel se ha adelantado en su campaña de vacunación. Más del 52 por ciento de su población de 9.3 millones de personas ha recibido una dosis y casi el 40 por ciento dos dosis de la vacuna de Pfizer, una de las tasas por cabeza más altas del mundo.
Tras llegar a un acuerdo para recibir gran cantidad de vacunas de Pfizer/BioNTech a cambio de datos médicos de los ciudadanos, Israel ha distribuido más de 8,6 millones de dosis desde que inició la campaña a finales de diciembre.
Aunque la tasa de vacunación sigue subiendo y caen los casos graves de COVID-19, la enfermedad que provoca el virus, la tasa de desempleo sigue siendo alta. En enero, el 18.4 por ciento de los trabajadores israelíes estaba sin empleo debido a la pandemia, según la Oficina Central Israelí de Estadística.
Mientras llevaba vacunas a sus ciudadanos, Israel ha proporcionado pocas vacunas a los palestinos en Cisjordania y la Franja de Gaza, lo que ha agravado la desigualdad. El gobierno ha sido criticado por no compartir con los palestinos una cantidad significativa de sus reservas de vacunas. Israel pospuso el viernes hasta nueva orden los planes de vacunar a los palestinos que trabajan en el país y en sus asentamientos en Cisjordania.
Las autoridades israelíes han dicho que su prioridad es vacunar primero a su población, mientras que la Autoridad Palestina ha dicho que se las arreglará por su cuenta para conseguir vacunas de la alianza que lidera la OMS con organizaciones humanitarias, conocida como COVAX.