Al expresidente peruano Alejandro Toledo se le negó este jueves la libertad bajo fianza en Estados Unidos y debe permanecer en la cárcel mientras se considera una solicitud del país sudamericano para su extradición.
Toledo es buscado por las autoridades peruanas para enfrentar acusaciones de que recibió 20 millones de dólares en sobornos de la constructora brasileña Odebrecht. Alguaciles estadounidenses lo arrestaron por una orden de extradición el 16 de julio, cuando llevaba 40 mil dólares en efectivo en una maleta.
"El doctor Toledo no ha proporcionado la carga de la prueba de que no es un riesgo de fuga", dijo el juez Thomas Hixson durante una audiencia en San Francisco.
Toledo se desempeñó como presidente de Perú desde 2001 hasta 2006.
Había ofrecido pagar un bono de un millón de dólares, compuesto por dinero en efectivo y propiedad de amigos y familiares, incluida la casa de dos maestros jubilados en el estado de Washington. El juez rechazó la propuesta.
"Perú no quiere una casa en Washington", comentó Hixson. "Quieren al doctor Toledo".
En un acuerdo con EU, Brasil y Suiza, Odebrecht admitió en 2016 haber establecido una vasta red de sobornos que repartió cientos de millones de dólares a políticos en América Latina y África para obtener contratos de construcción.
Además de Toledo, otros tres expresidentes peruanos se han visto envueltos en el escándalo, incluido el sucesor de Toledo como presidente, Alan García, quien se suicidó en abril cuando la policía llegó a su casa de Lima para arrestarlo.