Plan de imponer aranceles a México a partir del 10 de junio se mantiene: Gobierno de Trump

Mike Pence, vicepresidente de Estados Unidos, dijo este jueves que la decisión de seguir adelante con los aranceles a productos mexicanos a partir del próximo lunes depende del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. En tanto, la Casa Blanca afirmó que EU mantiene su postura.

El vicepresidente aseguró que, durante las pláticas, pidió a funcionarios mexicanos tomar medidas contra la migración para evitar los gravámenes. Señaló que las negociaciones continuarán en próximos días.

Además, dijo que Trump se mantendrá firme hasta que se resuelva la crisis migratoria en la frontera que ambos países comparten.

Por otro lado, la Casa Blanca informó que se mantiene firme en su posición de que México debe tomar medidas importantes para detener el aumento de migrantes centroamericanos si quiere evitar los aranceles a sus exportaciones a EU, de acuerdo con la portavoz Sarah Sanders.

"Seguimos adelante con los aranceles en estos momentos", dijo Sanders en un comunicado, que reaccionó a un reporte de que EU estaba considerando demorar la aplicación de los aranceles por el poco tiempo para llegar a un acuerdo con México.

El Gobierno mexicano está en pláticas con el estadounidense sobre temas migratorios y comerciales. El presidente de EU, Donald Trump, exige a México mejorar sus controles migratorios para evitar que migrantes lleguen a su país, y por eso amenazó con imponer aranceles a importaciones mexicanas.

Más temprano, fuentes consultadas por Bloomberg afirmaron que la administración de EU estaba considerando retrasar la imposición de gravámenes, ya que las conversaciones sobre migración continúan entre ambas naciones.

México está presionando por obtener más tiempo para negociar los pasos que debería tomar el Gobierno del presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador para evitar las tarifas, dijo una de las fuentes.

El 30 de mayo, el presidente estadounidense Donald Trump anunció que impondrá a partir del 10 de junio un arancel gradual, que inicia en 5 por ciento, a todos los bienes importados desde México, en represalia porque considera que dicho país no ha combatido el problema de la migración ilegal.