Los “peores elementos” de la Policía Federal terminaron por quedarse en la Guardia Nacional con lo que afectan el funcionamiento de este organismo, explicó este jueves Eduardo Guerrero, columnista de El Financiero.
El analista comentó que esto fue consecuencia de la decisión del presidente Andrés Manuel López Obrador de desaparecer a la Policía Federal.
“Los buenos elementos de la Policía Federal se fueron, porque tenían la oportunidad de conseguir chamba en algún otro lugar (...) y los peores elementos, aquellos que no tenían buen perfil, buen nivel, o miedo de salir al mercado laboral se quedaron en la Guardia”, comentó en el EF MEET POINT. Estrategia de seguridad. ¿A dónde nos lleva?.
Un reflejo de esta corrupción, señaló Guerrero, es el caso de una red de secuestradores descubierta en Oaxaca y que estaba formada por expolicías federales que trabajaban en la Guardia.
El analista consideró que López Obrador eliminó a la Policía Federal tras analizar cuánta corrupción había y considerar que era una organización que “no se podía reparar”.
Sin embargo, la construcción correcta de la Guardia (constituida apenas en 2019) es un proceso que requiere mucho tiempo.
“Ahí le falló el cálculo al presidente”, apuntó.
Guerrero destacó también que solo 10 por ciento de los elementos de la Guardia Nacional aprobaron el proceso de certificación.
“Está muy grave la situación de la Guardia y yo creo que por eso el presidente planea enviarla a la Sedena”, agregó.
López Obrador adelantó que la iniciativa para concretar ese cambio será enviada al Congreso hasta 2023.