La maestra Delfina Gómez negó haber retenido 13 millones de pesos del salario de sus empleados cuando fue presidenta municipal de Texcoco para fines partidistas y aseveró que tiene la “calidad moral” para ser secretaria de Educación Pública, ya que, más allá de una candidatura, su prioridad es el cargo al frente de la dependencia.
Al comparecer ante los integrantes de la Comisión de Educación del Senado, la funcionaria fue cuestionada por la panista Xóchitl Gálvez, quien refirió que tanto el Instituto Nacional Electoral como el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación confirmaron que retuvo el salario a sus empleados, lo cual fue una decisión ilegal y una conducta inapropiada, por lo cual ella misma la denunció ante la Fiscalía de Delitos Electorales y en la Fiscalía del Estado de México.
“¿No debería separarse del cargo para que puedan las instituciones hacer una investigación seria y que haya castigo a este tipo de conductas? (...) Si hablamos de corrupción, yo creo que hay que hablar de todas las corrupciones”, dijo la senadora del PAN.
Ante ello, la secretaria respondió: “Yo jamás haría una cosa así, y tengo precisamente esa calidad moral para estar aquí, porque mis padres, mi familia y mis amigos me enseñaron ante todo la pulcritud en un trabajo, y en el desempeño de una función”.