Nacional

Caso cerrado: Función Pública descarta conflicto de interés entre AMLO y Grupo Vidanta

La Secretaría de la Función Pública informó que el presidente López Obrador no incurrió en alguna falta administrativa al nombrar a Daniel Chávez como supervisor del Tren Maya.

La Secretaría de la Función Pública (SFP) informó este viernes 6 de mayo que el presidente Andrés Manuel López Obrador no incurrió en alguna falta administrativa pública al nombrar a Daniel Chávez Morán, fundador de Grupo Vidanta, como supervisor del Tren Maya.

“No se encontraron evidencias competentes y concluyentes que acreditaran la presunta comisión de hechos, actos u omisiones susceptibles de configurar alguna falta administrativa atribuible al servidor público y a los particulares”, dijo.

En un comunicado, la dependencia argumentó que el empresario Chávez Morán, quien fue nombrado como supervisor honorario de dicho proyecto, no recibió ningún sueldo, pago o retribución por parte de la Administración Pública Federal.

Por este motivo, la SFP “no encontró irregularidades” en los actos jurídicos relacionados entre el Grupo Vidanta e instituciones del Gobierno del presidente López Obrador.

Incluso, la dependencia aseguró que no tiene competencia para investigar actos jurídicos ajenos a la Administración Pública Federal, ni tampoco los actos celebrados fuera del territorio nacional, como los que se refieren en el escrito acerca de la empresa KEI Partners.

En febrero pasado, el líder de Grupo Vidanta negó toda relación comercial o de trabajo con el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, a quien, dijo, solo asesora de forma honoraria en el Tren Maya.

Daniel Chávez aseguró que la única concesión que ha recibido durante este gobierno es la correspondiente a 11 mil 663.74 metros cuadrados que fue una asignación para escurrimientos aprobada el 19 de abril de 2022.

En cuanto a su papel como asesor honorario del Tren Maya, Chávez dijo que su labor solo consiste en revisar, de forma fidedigna, el avance del proyecto, el cual, considera, será un motor económico para el sureste del país.

Las declaraciones del empresario hotelero ocurren después de que José Ramón López Beltrán, hijo mayor del presidente, revelara que trabaja para KEI Partners, una empresa de desarrollo inmobiliario propiedad de dos hijos del fundador de Grupo Vidanta.

Advertising
Advertising