Luego de que en días pasados se diera a conocer el robo de un helicóptero Bell 206, Jet Ranger, color gris, en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), las autoridades aclararon que el hecho ocurrió el pasado 21 de julio, y no a principios de agosto, como dijeron los propietarios.
De acuerdo con la bitácora de vuelo, el último despegue de esa aeronave de los hangares del AICM fue a las 18:00 horas del pasado 21 de julio, con rumbo al Ajusco, en el sur de la capital del país, donde el piloto que sacó la nave —valuado cerca de un millón de dólares— se registró con el nombre de Geovanni Hernández e iba en compañía de otra persona.
El permiso de despegue fue otorgado a un piloto con licencia e identificación oficial, según las autoridades. Desde aquel día, la nave no regresó a la terminal aérea capitalina y, a la fecha, se desconoce su paradero.
No obstante, la denuncia por el robo de la nave se presentó hasta el 3 de agosto, por Guadalupe Leticia R., esposa de Jesús Silvestre R. C., el dueño del helicóptero, quien desapareció el 24 de junio, cuando se encontraba en el municipio de Temixco, Morelos y no ha sido localizado.
Guadalupe Leticia denunció la ausencia de su esposo ante la fiscalía de Morelos y, días después, le llamaron para pedir un rescate para el que solo consiguieron un millón y medio de pesos. No obstante, las autoridades de Morelos y las de la Ciudad de México no han confirmado o desmentido dichos datos.
Ante esto, no fue sino a principios de agosto, cuando su empleado, Juan A. G., acudió al aeropuerto y le informó que la aeronave ya no estaba en el hangar.
La señora explicó que su esposo Jesús Silvestre R. C., tenía un adeudo en el AICM por la renta del hangar y, no fue sino hasta después cuando supo que el día en que la nave se vio por última vez en el aeropuerto fue el 21 de julio, donde el piloto que se llevó el helicoptero pagó la cantidad que se debía y se fue del
Leticia agregó que cuestionó al administrador del hangar, Mario Alberto Ch., sobre las imágenes de la bitácora de vuelo, pero éste respondió que no la encontraba y le negó las imágenes de las cámaras de seguridad del lugar.
Cabe señalar que, el helicóptero robado era rentado para vuelos privados y viajes de tipo turístico que se promocionaba a través de la página “Zulu Alfa Eventos”, una agencia de viajes que ofrecía el servicio de sobrevuelos recreativos.
Respecto a este caso, la administración del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) se deslindó de los hechos. Dijo que los hangares para helicópteros se rentan a personas morales debidamente acreditadas ante autoridades aeronáuticas.
Agregó que la renta es para la prestación de servicios de guarda y mantenimiento de ese tipo de aeronaves.
“Por ello, el resguardo y operación de las mismas está a cargo exclusivo de esas empresas y del personal que contraten”, dijeron las autoridades del AICM mediante un mensaje en Twitter.