Actualmente, los avances de la ciencia han logrado que los seres humanos prevengamos y nos curemos de casi cualquier enfermedad; sin embargo, existen algunas enfermedades como la Hepatitis C que aún no tienen vacuna y, aunque si es tratable y puede curarse, si no la detectamos a tiempo puede llevarnos a requerir un trasplante de hígado o a la muerte.
Sin saberlo podríamos estar infectados con el Virus del Hepatitis C (VHP), por eso importante informarnos sobre el tema. Es importante apuntar que existen cinco cepas principales del virus de la hepatitis (A, B, C, D y E) y, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), tan solo en el continente americano se producen al año alrededor de 67 mil contagios de Hepatitis C y aproximadamente 84 mil defunciones por su causa.
Lo primero que debes saber es qué es la hepatitis; pues se trata de una enfermedad hepática, y por su terminología se define como una inflamación del hígado. Los tipos o cepas de la hepatitis tienen diferencias entre sí que radican en aspectos como sus formas de transmisión, la gravedad de la enfermedad, la distribución geográfica y los métodos de prevención, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En esta ocasión nos centramos en el Virus de Hepatitis C (VHC), que se transmite a través del contacto con sangre o fluidos infectados. Es decir, por relaciones sexuales o hasta drogas inyectadas. Sin embargo, más adelante se explicarán brevemente los otros tipos de la enfermedad.
¿Qué es la Hepatitis C?
El gobierno de México estima que alrededor de 600 mil personas en viven con infección por el Virus de la Hepatitis C (VHC), de los cuales menos de 25 por ciento conoce su diagnóstico y apenas 1 por ciento de ellas recibe tratamiento.
Para contraer Hepatitis C, las personas deben haber estado en contacto directo con sangre o fluidos infectados con el VHC, por lo que el más mínimo punto de sangre puede ser un peligro que infecte a otra persona y el virus es difícil de matar.
La enfermedad puede ser aguda (a corto plazo) o crónica (a largo plazo). Con un diagnóstico temprano, sin embargo, los tratamientos modernos pueden curar la Hepatitis C y evitar el daño hepático.
Algunas de las causas de infección más comunes que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos son:
- Uso de drogas inyectables
- Una transfusión de sangre o un trasplante de órganos antes de 1992, cuando no se realizaban análisis regulares de sangre
- Recibir un pinchazo accidental con una jeringa usada, que puede ocurrir en ambientes de atención de la salud.
- Nacer de una madre que tiene hepatitis C
- Relaciones sexuales sin protección con un o una portadora del VHC
- Compartir artículos de uso personal como cepillo dental, rastrillos y rasuradoras
- Hacerse un tatuaje o perforación con material no estéril y/o infectado por su reutilización
¿Cuáles son los síntomas de la Hepatitis C ?
La Hepatitis C crónica, o de largo plazo, es una enfermedad silenciosa que puede persistir sin que sepamos que la padecemos y causar daños al hígado que derivan en enfermedad hepática. Los síntomas son:
- Aparición de moretones o hematomas
- Fátiga
- Ictericia, que es como se le denomina a la coloración amarillenta de ojos y piel
- Orinar en tonalidad oscura
- Picazón en la piel
- Hinchazón de piernas
- Perdida de peso
- Somnolencia
- Encefalopatía hepática, es decir, dificultad en el habla
¿La Hepatitis C tiene cura?
Para este tipo no existe vacuna; sin embargo, existe un tratamiento médico que consiste en tomar medicamentos llamados antivirales de acción directa (AAD).
Asimismo, se recomienda as quienes la padecen no donar sangre ni órganos; no compartir artículos de uso personal (rastrillo, jeringa, cepillo dental o cortaúñas).
Si fuiste recientemente fuiste diagnosticado con el VHC, es recomendable informar a tu pareja sexual y siempre usar protección durante el acto.
Los otros tipos de Hepatitis
Existen cinco tipos principales del virus de la hepatitis, cada uno de estos se transmite de diferente manera y de acuerdo con la publicación médica Medical News Today son los siguientes:
- Hepatitis A: se transmite a través del contacto con las heces que contienen el virus o mediante el consumo de agua potable no tratada o alimentos contaminados con el virus. Esta es causada por una infección del virus VHA.
- Hepatitis B: se transmite a través del contacto con sangre, semen u otros fluidos corporales infectados. También la puedes contraer al compartir una rasuradora, drogas inyectadas o simplemente tener relaciones sexuales con alguien que tenga el virus VHB
- Hepatitis D: se transmite a través del contacto con sangre y otros fluidos corporales infectados. El virus VHD y se trata de uno de los tipos más graves de la enfermedad. Para tener este tipo, es necesario que antes tengas presentes el tipo B de la enfermedad, ya que esta no se puede multiplicar sin la presencia del virus VHB.
- Hepatitis E: se transmite al consumir agua o alimentos contaminados.
Todos los tipos de hepatitis descritos pueden prevenirse excepto la C que puede llegar a ser crónica y también puede ser curable a través de tratamientos efectivos.
Otra forma de contraer alguno de los cinco tipos de hepatitis es por el consumo excesivo de alcohol u otras toxinas, ya que pueden dañar las células del hígado y provocar a un daño permanente del órgano.