En el juicio a Genaro García Luna en Estados Unidos, Jesús Reynaldo Zambada García ratificó que sobornó a un funcionario del gobierno de Andrés Manuel López Obrador cuando fue jefe de Gobierno de la Ciudad de México.
Aceptó que el dinero lo dio a Gabriel Regino, que entre 2003 y 2006 fue subsecretario de Seguridad Pública de la Ciudad de México, quien le dijo que era para la campaña, pero no precisó cuál.
El tema López Obrador salió ayer en la audiencia 12 del juicio a García Luna, en la que la defensa continuó en el contrainterrogatorio a Rey Zambada, hermano del Mayo, líder del Cártel de Sinaloa.
César de Castro, abogado de García Luna, trató de acorralar a Rey para que precisara montos de los sobornos que el Cártel de Sinaloa entregó a las autoridades capitalinas y el destino de esos recursos.
El abogado preguntó a Zambada si recordaba que en julio de 2013 declaró ante fiscales de Estados Unidos que pagó 7 millones de dólares para la campaña de López Obrador.
La pregunta fue imprecisa, pues refirió a la campaña contra Vicente Fox, lo cual nunca ocurrió; los adversarios electorales de López Obrador fueron Felipe Calderón (2006), Enrique Peña Nieto (2012) y Ricardo Anaya (2018).
Rey Zambada respondió que no, que no pudo haber dicho eso, porque no es cierto. De Castro insistió diciendo que si no recordaba que a través de Gabriel Regino mandó dinero a la campaña de López Obrador. Zambada aseguró que lo que recordaba es que Regino le dijo que era para una campaña, pero no para cuál.
De Castro intentó mostrar a Zambada la transcripción de su declaración hecha en julio de 2013 para “refrescarle la memoria”, pero el intento fue apelado por la fiscalía y el juez Brian Cogan lo frenó.
Tras una breve charla en privado entre la fiscalía, el abogado y el juez, el caso de López Obrador ya no se tocó en la sala 8D de la Corte del Distrito Este de Nueva York, con sede en Brooklyn.
En México, Regino dijo que él no es el procesado y fue mencionado “porque estamos en un contexto político donde se pretende vincular a otras personalidades, así es la política, así es el proceso penal”, atajó.
Con la declaración de Zambada y la del agente de la corte George Dietz, quien también compareció ayer, la fiscalía concluyó la presentación del caso contra García Luna.
En total fueron 26 testigos que, únicamente con sus dichos, muchos de ellos de oídas, acusaron a García Luna de recibir sobornos del crimen organizado. La fiscalía no presentó ningún tipo de evidencia como documentos, fotografías, videos, grabaciones o correos electrónicos.
El principal testigo, Rey Zambada, es el único que dijo haber presenciado la entrega de sobornos a García Luna, pero al final cayó en contradicciones sobre los montos.
Dijo que fueron dos entregas, aunque la defensa evidenció que ha dado varias versiones sobre el monto en cada una de sus declaraciones, incluso la cambió en el contrainterrogatorio de ayer.
El capo justificó que quizá se confundió, pues le daba miedo hablar del poderoso García Luna. “Uno piensa en su familia”, dijo.
De Castro cuestionó a Zambada si tenía alguna prueba para demostrar su dicho, a lo que el testigo dijo que no. El abogado atajó preguntando si entonces sólo quedaba creer en su palabra, a lo que el testigo respondió que sí.
En la parte final de la declaración de Rey, la fiscalía recompuso lo dicho por el testigo al cuestionarlo de manera directa si tenía duda de haber pagado sobornos a García Luna. “Claro que no, estoy seguro”, insistió.
Ayer concluyó la etapa de testigos. Hoy se esperan las conclusiones de la fiscalía y la defensa. Y el veredicto podría ser dictado antes del viernes.