Marcelo Ebrard finalmente aclaró su futuro y dijo que continuará en Morena luego de un par de meses en los que su continuidad fue cuestionada luego de perder el proceso interno en el que buscaba ser el candidato del partido para la Presidencia en 2024.
Durante un evento este lunes 13 de noviembre Ebrard recalcó que milita en la cuarta transformación, y que a pesar de que Morena reconoció irregularidades en su proceso interno, continuará en el partido debido a que la resolución del oficialismo sobre su proceso interno significa un pas decisivo y un entendimiento con Claudia Sheinbaum, quien venció a Ebrard en el proceso interno y será la candidata a la Presidencia.
Morena admitió que en su proceso interno, que dio resultados el 6 de septiembre, hubo irregularidades, mismas que tendrán sanciones a la militancia que las ocasionó; sin embargo, no pueden reponer el proceso interno, a lo que Ebrard, quien fue secretario de Relaciones Exteriores, respondió que esta resolución y punto de acuerdo funcionan para saber “cuál es su idea política, de qué se trata y cómo va a ser el futuro, si nosotros somo la segunda fuerza de Morena... debemos ser tratados como tales”.
Marcelo Ebrard lleva un par de meses lejos del ojo público luego de que perdiera el proceso interno de Morena y lo impugnara en su desacuerdo con el método de conteo de encuestas y el posterior resultado. Hasta este domingo 12 de noviembre hubo rumores de que se uniría a Movimiento Ciudadano para buscar la candidatura presidencia de dicho partido, incluso su dirigente nacional, Dante Delgado, lo invitó a registrarse, pero Ebrard se negó.
De amenzar con salir de Morena a quedarse y buscar un puesto de jerarquía en 2024: Esto ha pasado con Ebrard
Marcelo Ebrard perdió el proceso interno de Morena el 6 de septiembre pasado, fecha en la que comenzaron los rumores de una salida del partido de parte del exsecretario de Relaciones Exteriores, ya que no se presentó al evento en el que se revelaron los resultados y se anunció el triunfo de Sheinbaum.
Ese mismo día comenzó el rompimiento entre los marcelistas y algunas otras corrientes de Morena, ya que la representante de Ebrard en el proceso interno, la senadora Malu Micher, fue agredida y le negaron el acceso al World Trade Center, donde se llevaba el conteo de urnas.
El día caótico terminó con Claudia Sheinbaum diciendo a Ebrard que todos tenían lugar en Morena y que quería que formara parte del movimiento.
La situación turbolenta de Morena provocó que decenas de políticos se expresaran al respecto, y mientras Mario Delgado, líder nacional del partido guinda, decía que el proceso interno fue honesto y retaba a Ebrard a no abandonar el partido, el líder nacional del PAN, Marko Cortés, lo invitó al Frente Amplio por México.
Al día siguiente, el presidente Andrés Manuel López Obrador pidió a Ebrard no romper con Morena y pensar en el “interés superior”, que era la transformación del país; sin embargo, el excanciller ya había avisado que iban a pasar unos días para esclarecer su futuro político.
El mismo 7 de septiembre, y luego de que diversos funcionarios de Morena recordaran a Ebrard que el movimiento era su casa, el exjefe de Gobierno de la Ciudad de México descartó lanzarse como candidato independiente, cerrando una de las posibilidades de buscar la Presidencia; sin embargo, asegurando que estaría en la boleta.
Desde esa fecha comenzaron los rumores de que Marcelo Ebrard podría buscar la candidatura representando a Movimiento Ciudadano, el único partido que hasta la fecha falta por anunciar a su abanderado en las elecciones presidenciales de 2024.
El 11 de septiembre salió a la luz la impugnación del proceso interno de Morena por Marcelo Ebrard, misma que en un principio fue negada por Morena y que con apoyo del Tribunal Electoral, el partido tuvo que responder, confirmando las irregularidades de diversos personajes del partido en el proceso de selección de candidato.
Para el 18 de septiembre Marcelo Ebrard reapareció, ahora con un nuevo movimiento llamado El Camino de México, que es una corriente política dentro de Morena, misma que fue rechazada por Mario Delgado, y que a pesar de eso, continúa vigente y ha agrupado a los militantes ‘marcelistas’ que confían en él para lograr la Presidencia.
Ebrard volvió a la ofensiva y criticó a Delgado, a quien le dijo que no entendía lo que pasaba con su movimiento político, y que el últimatum para que respondieran su impugnación seguía vigente. Además criticó a Sheinbaum y su narrativa de mantener la unidad como fuera, ya que dijo que eso sonaba a las dinámicas del PRI.
Para el 26 de septiembre Ebrard acudió al Tribunal Electoral con motivo de que resolvieran su impugnación, a lo que Mario Delgado señaló que la Comisión de Elecciones de Morena no había violado ningún plazo. Para el 28 de septiembre el Tribunal ordenó a Morena la solución de la petición del excanciller. Fue hasta el 2 de octubre que el partido admitió la queja.
Luego de días de silencio, Ebrard volvió a meter tensión en Morena, asegurando que el partido ya tenía los resultados de las encuestas del proceso interno sin contarlos, tema que Claudia Sheinbaum negó.
Las aguas se calmaron durante semanas, y para finales de octubre Dante Delgado señaló que Marcelo Ebrard sí era opción para Movimiento Ciudadano en 2024.
Incluso a finales de octubre el diario El País reportó que Ebrard tenía como condiciones que Morena diera una disculpa por el proceso interno y que un porcentaje de las candidaturas para las gubernaturas en 2024 fuera entregadas a los ‘marcelistas’.
En el caso de Movimiento Ciudadano, si querían a Marcelo Ebrard como candidato, supuestamente tendrían que darle los primeros puestos en el Senado y en la Cámara de Diputados a su equipo. Incluos a inicios de noviembre los marcelistas amenazaron con irse de Morena, ya que no tendrían nada que hacer en el partido si continuaba el distanciamiento.
Aún no ha pasado nada respecto a dichas condiciones, y este fin de semana Marcelo Ebrard volvió a la conversación debido a la posibilidad de registrarse para Movimiento Ciudadano el domingo, así como que Morena dio su resolución del proceso interno.
Todo quedó en que este 13 de noviembre dijo que permanecerá en Morena y que espera que, siendo la segunda corriente con más peso en el partido, se le trate como se debe.
Con información de El País.