El expresidente Ernesto Zedillo declaró que “cada que algún político que no entiende algunas cosas, y quiere insultar a alguien, le dice neoliberal”.
Al participar en un panel organizado por el banco de inversión Actinver, que se realizó a puerta cerrada en la Hacienda de Los Morales, el exmandatario, de acuerdo con la revista Expansión, advirtió que en América Latina “las fallas de algunas políticas del pasado han provocado la apertura de espacios para que el populismo haya renacido en algunos de nuestros países”.
En ese sentido, alertó que existen liderazgos “populistas” que dicen fomentar la democracia, pero, al mismo tiempo, buscan erosionarla.
“El mayor reto es proteger la democracia. Si evitamos esta regresión que vemos en algunos países, seré optimista”, dijo en el panel moderado por el conductor de televisión Leo Zuckermann y en el que también participó el expresidente del gobierno de España José María Aznar.
“Vemos países en los que el liderazgo político llegó al poder con la democracia, que todos los días dice que el país vive en democracia, pero todos los días trabaja para erosionar las bases de la democracia. Lo hace buscando eliminar los pesos y contrapesos del poder público, los organismos autónomos, debilitarlos con muchos procedimientos”, dijo Zedillo.
Y agregó: “En el pasado, algunos lograban apoderarse del poder con los militares. Lo que ha sucedido es que han aprendido cómo funciona el sistema y les gusta la democracia hasta que acceden al poder, y una vez que ya han accedido, buscan erosionar la democracia”.
De acuerdo con Zedillo Ponce de León, los gobiernos populistas “procuran tener un Congreso sumiso, mayoritario hasta donde se puede, y cuando alguno de los otros poderes del Estado trata de cumplir su trabajo constitucional, se dedican a buscar la manera de que ese poder esté integrado por individuos que se van a apegar no a lo que dice la Constitución, sino a lo que quiere y desea el soberano”.
A propósito de la visita de Zedillo al país, el presidente Andrés Manuel López Obrador le lanzó cuatro preguntas ayer en su conferencia matutina.
“¿Por qué convirtió las deudas privadas de unos cuantos en deuda pública con el Fobaproa? ¿Por qué envió al Congreso una reforma de pensiones donde el trabajador, al jubilarse, no va a recibir ni 50 por ciento de su salario? ¿Por qué durante su gobierno no aumentó el salario mínimo, sino que, al contrario, se redujo el poder de compra del salario? ¿Por qué desapareció los trenes de pasajeros y se fue a trabajar a la empresa a la que le entregó los Ferrocarriles Nacionales?”.