Un reportaje estadounidense provocó un jueves 23 de febrero plagado de polémica, ya que señala a personas allegadas al presidente Andrés Manuel López Obrador de supuestamente recibir dinero de parte de Los Zetas, así como de Ismael ‘El Mayo’ Zambada, líder de una de las facciones del Cártel de Sinaloa.
La investigación dada a conocer por el diario The New York Times llegó a la conferencia matutina del mandatario mexicano, quien reclamó que supuestamente se trataba de una calumnia en su contra, aprovechando los tiempos electorales que se viven en México.
Sin embargo, el hecho de que López Obrador leyera el cuestionario del diario estadounidense y de paso revelara el número telefónico de la periodista que lideraba el reportaje fue cuestionado nacional e internacionalmente, al grado de que The New York Times publicó un texto al respecto.
¿Cómo se vinculan Los Zetas con AMLO según The New York Times?
De acuerdo con la investigación en el diario estadounidense, dos aliados de López Obrador habrían recibido hasta 4 millones de dólares procedentes de uno de los líderes de Los Zetas con la finalidad de que quedara libre.
Dicha entrega ocurrió en la segunda mitad de 2018, luego de que López Obrador ganara las elecciones presidenciales con amplia ventaja. No se brindó el nombre del líder de la banda criminal que buscaba su libertad, y cabe recordar que en ese año se detuvo en México a Eleazar Medina Rojas, también conocido como ‘El Chelelo’ y quien el año pasado fue extraditado a Estados Unidos.
¿Cuál era la situación de Los Zetas en 2018?
Para aquel entonces, Los Zetas tenían cerca de 20 años de haberse fundado, con el fin del conflicto interno en el Cártel del Golfo.
Osiel Cárdenas había quedado al mando del cártel, y con el fin de tener un brazo armado poderoso, se dedicó a la búsqueda de personas con experiencia militar para preparar a los sicarios de la organización criminal.
En 2003 cayó preso Cárdenas, lo que significó una reestructura y un área de oportunidad para que Los Zetas siguieran creciendo mientras México vivía la ‘guerra contra el narco’ de Felipe Calderón.
Los movimientos de poderes se hicieron más notorios en 2007, cuando Osiel Cárdenas fue extraditado a Estados Unidos. Esto provocó una división entre Los Zetas y el Cártel del Golfo, misma que se acentuó en 2010 y cuando se fracturó la organización criminal, llevando a años de enfrentamientos.
Los Zetas eran una de las organizaciones criminales más poderosas, y rápidamente se expandieron a lo largo del país a partir de 2010; sin embargo, los rompimientos internos le fueron debilitando hasta dividirlo en dos grandes facciones en 2015: Los Zetas de la Vieja Escuela y el Cártel del Noreste.
Para 2018 Los Zetas ya no eran lo mismo que años atrás, y ese año perdieron al ‘Chelelo’, uno de sus lugartenientes más importantes. De acuerdo con Insight Crime, para esos años la organización criminal ya había perdido su presencia a nivel nacional y solo se dedicaban a disputas en sus plazas.
Se sabe de operaciones en estados como Tamaulipas y Veracruz, aunque se desconoce el alcance que tiene la organización en la actualidad.
A Los Zetas se les recuerda como una de las organizaciones criminales más violentas en la historia del país, que fueron capaces de incendiar el Casino Royale cobrando la vida de decenas de personas.