Morena celebró la “sensatez” y la “decencia” del ministro Alberto Pérez Dayán y la oposición del PRI y el PAN criticaron su “cobardía”, el buscar “salvar su pellejo” y “ponerse del lado de la tiranía”.
El líder de Morena en la Cámara de Diputados, Ricardo Monreal, consideró que “prevaleció el derecho, la Constitución, la mesura y la sensatez de algunos de los ministros, y lo que ahora se ha logrado en la Corte nos da la razón”.
Estimó que “la sensatez del ministro Alberto Pérez Dayán, al rechazar la propuesta del ministro Juan Luis González Alcántara, evita una violación constitucional y la invasión de facultades del Legislativo. La improcedencia del proyecto era evidente”.
En el Senado, el presidente de la Mesa Directiva, Gerardo Fernández Noroña, de Morena, afirmó que el “golpismo” perdió”. “Les reconozco la decencia a quienes, no estando de acuerdo con nosotros, dijeron: ‘no, ese ya es un extremo que no se puede tolerar’. Hoy la Corte se derrotó a sí misma por un actuar incorrecto, faccioso, sesgado, y hoy la patria se salva”, dijo.
El senador hasta le deseó “larga vida” a Pérez Dayán.
En contraste, el senador y dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno, se lanzó contra el ministro: “Decisión notoriamente determinada por el repentino cambio de postura del cobarde ministro Alberto Pérez Dayán. Un traidor al pueblo de México que tiró su nombre en el basurero de la historia”.
La coordinadora de los senadores del PAN, Guadalupe Murguía, también acusó de “traición” a los ministros.
El diputado Federico Döring opinó que “será una página negra para la Corte y un día triste para el país”. “Es lamentable que un ministro anteponga su beneficio personal, que piense en cómo le vaya bien, no pensar en la República y que vea en cómo salvar su pellejo”. “La historia los juzgará”.
La coordinadora de los diputados del PAN, Noemí Luna, opinó que “así empezó Venezuela. Están matando la división de poderes, la democracia y las libertades”. La diputada panista Margarita Zavala alertó que “se está perdiendo la división de poderes y el acceso a la justicia”, porque “la voluntad popular no es la manera de elegir a nuestros juzgadores”.