El senador Gustavo Madero advirtió que con el planteamiento de una nueva Constitución "el presidente Andrés Manuel López Obrador está preparando el terreno mediático para seguir la misma ruta que han seguido todos los autoritarismos de Centroamérica y Latinoamérica, que entran con una elección democrática pero terminan modificando la Constitución para perpetuarse e instaurar un régimen".
"Esto es lo que es muy peligroso, que a 62 días de su mandato esté queriendo generar tanta crispación, tanta incertidumbre, tanta preocupación y mantener a la opinión pública distraída de los temas importantes", dijo.
En entrevista con El Financiero, apuntó que pareciera que López Obrador está trabajando mucho más para sus mañaneras que para gobernar, y agregó que otra de las grandes amenazas es que está queriendo empoderar al Ejército como su factor primordial para conservar el poder en caso de tener cualquier pérdida de popularidad.
En ese sentido insistió que "el nuevo gobierno nos está llevando a esa ruta de los gobiernos centroamericanos y latinoamericanos, este socialismo del siglo XXI tan fracasado".
El también expresidente de Acción Nacional se refirió también las reformas que impulsará el presidente en este periodo de sesiones como la del catálogo de delitos que ameritarán prisión preventiva oficiosa y el fuero.
"Yo creo que esa no es su agenda, su agenda va a ser cuando trate de poner la revocación de mandato, esa va a ser la madre de todas las batallas porque ahí se va a jugar la mayoría de la Cámara de Diputados, él va a querer insistir aparecer en la boleta con esta supuesta consulta democrática a la gente para ver si quiere que permanezca otros tres años en el gobierno.
En realidad, dijo el legislador, esto es una trampa para poder él estar en seis millones de spots y ayudar con su popularidad a todos los diputados y diputadas de Morena que a muchos de ellos nadie los conoce y no tendrían la posibilidad de triunfo si él no aparece en la boleta y en la campaña del 2021.
Comentó que López Obrador no quiere que le pase lo que le pasa al residente de Estados Unidos donde actualmente tiene una Cámara de Representantes con mayoría demócrata, no quiere perder la sobrerrepresentación porque se siente muy cómodo con el 61 por ciento de todos los diputados, cuando solamente ganó con el 43 por ciento.
En la Cámara de Senadores, explicó, le faltan 15 votos para poder aprobar una reforma constitucional, por lo que señaló que ahí se verá de qué están hechos los partidos de oposición, así como qué tan cooptables son los distintos senadores de oposición. "Yo esperaría que entendamos la alternancia histórica de mantener un bloque opositor mínimo de 46 senadoras y senadores y logremos impedir estas reformas", señaló.