Luego de que la Secretaría de Salud sumó otro despido de un médico de alta especialidad, al prescindir de los servicios del doctor Miguel Ángel Celis López, director del Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía, quien tenía 25 años de servicios en institutos nacionales de alta especialidad, doctores del sector público llamaron a un paro de labores para el 10 de marzo.
De acuerdo con personal de ese centro de salud federal de alta especialidad, el despido del doctor Celis López respondió a una supuesta "represalia", por haberse negado a signar un acuerdo que lo obligaba a brindar atención gratuita, sin resolver el problema de falta de medicamentos y otros insumos.
"Su destitución es una cortina de humo para desviar la atención del verdadero problema: la incapacidad del gobierno federal para organizar un sistema de salud eficaz, que sólo necesitaba recursos para contratar al personal despedido y comprar insumos", denunció el doctor Martín Granados, jefe del servicio de Cabeza y Cuello del Instituto Nacional De Cancerología de México.
El médico señaló que "lo instalado, aunque insuficiente, funcionaba razonablemente bien, gracias a todos los trabajadores de la salud".
Anotó que los desabastos surgieron por "falta de planeación e incapacidad para hacer licitaciones en el tiempo preciso, así como por "la falta de pago del gobierno a los hospitales por la atención otorgada a pacientes del extinto Seguro Popular".
"Ante la incapacidad y mezquindad del gobierno federal, éste quiere hacernos parecer como los causantes de los problemas de salud, e incluso los causantes de un desastre que se avecina", manifestó.
El doctor Martín Granados puntualizó que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador "cuenta con el mayor presupuesto de la historia", y preguntó que "¿si ya no existe corrupción, dónde está el presupuesto?
Por otra parte, el doctor del Instituto de Cancerología acusó a las autoridades federales de Salud de "querer someternos a una política de miedo, aprovechando nuestra distracción por atender nuestro trabajo".
Al respecto, llamó a la comunidad médica del país que labora en el sector salud a "manifestarse en forma pacífica, pero enérgica, contra las arbitrariedades no sólo a médicos, también ante los niños y mujeres con cáncer y sida".
"¿Te sumas a un día sin médicos para el día 10 de marzo? La enfermedad no espera y los recursos no sobran en otros hospitales. Los médicos no hemos recibido los recursos necesarios, ni somos los enemigos del pueblo, sino sus aliados".
Enfatizó que "las acciones del gobierno no hacen otra cosa que polarizar a nuestra sociedad, buscando dividirla y hacerse de clientes y rentas que los perpetúen en su mezquina búsqueda del poder".