CIUDAD DE MÉXICO.- La iniciativa enviada por el presidente Enrique Peña Nieto ayer al Senado de la República, en la cual se plantean reformas a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos, en la que se permitiría la portación de armas a agentes extranjeros de aduanas y migración, podría ser el primer paso para medir el 'termómetro' en el Congreso de la Unión y avanzar, en una propuesta posterior, a un debate nacional que permita que agentes de inteligencia de Estados Unidos puedan realizar sus actividades en territorio nacional con la portación de armas de fuego.
"Ésa siempre ha sido una exigencia de la Unión Americana", indicó Jorge Torres, experto en seguridad nacional y autor del libro Auge y decadencia del espionaje mexicano.
Expone que aunque no se entiende bien el propósito de la iniciativa del Ejecutivo nacional, sobre todo en este momento, en el sentido de permitir que agentes extranjeros puedan portar armas de fuego en aduanas, centros de migración y en misiones diplomáticas, subraya que si esta iniciativa logra pasar, "pues están las condiciones dadas para que otra iniciativa permita que agentes de inteligencia estadounidenses tener ciertas prerrogativas".
Veo que el Presidente quiere medir el estado de ánimo del Congreso para un debate posterior. A los gobiernos de Estados Unidos siempre les ha interesado esta cuestión...
"No veo para qué el propósito de una iniciativa donde sólo los agentes aduanales puedan portar armas", recalca.
Jorge Torres opina que "es una locura" que agentes de la Unión Americana todavía estén investigando y enfrentando a los cárteles mexicanos del narcotráfico sin armas, aunque de facto lo hacen.
Siempre han querido que en la ley se les permita a sus agentes de inteligencia, sobre todo de la DEA, utilizar armamento...