Llegar a las sierras y a las zonas rurales, así como apoyar a las mujeres son algunos de los objetivos de Ana Gabriela Guevara, exmedallista olímpica y próxima titular de la Conade, para fomentar el deporte durante el gobierno del presidente electo, Andrés Manue López Obrador.
"Lo más importante es elaborar el Plan Nacional del Deporte y el Plan Estratégico para México, independientemente de lo que pase cambiando de sexenio o la ruta que decidan en materia deportiva.
"Una de las principales fallas es que no hay un plan, seguimos surgiendo deportistas de casualidad, garbanzos de a libra o por méritos propios", dijo en entrevista para el programa En EF y por Adela
Indicó que ya está trabajando en un censo para saber a qué segmentos acercar el deporte, pese a que todavía faltan algunos meses para que llegue a la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte.
"Ya estamos trabajando en un censo por estado, de edades, con segmentos de los niños de cinco a 10 años, de 10 a 15, de 15 a 20, y empezar a ver en esos segmentos a dónde podemos llegar", detalló.
Abundó que una de las indicaciones del presidente electo es vincular el deporte con la educación.
"Eso será una tarea titánica, junto con Esteban Moctezuma (propuesto para la Secretaría de Educación Pública)", reconoció la exatleta.
Señaló que también es relevante la activación y la movilidad de la población en general.
"No podemos dejar a un lado la intención y la voluntad o el interés de la población en general de participar en una activación deportiva. Una siguiente fase sería activar todo el motor deportivo: municipio, estado y federación", describió.
Añadió que se buscará la activación de los espacios públicos, a través de la generación de infraestructura o la recuperación de la existente, y también la adaptación de los lugares, las sierras, las zonas rurales, los grupos vulnerables, etcétera, para la práctica del deporte.
Sobre los beneficios del deporte, detalló que este sirve para la readaptación, educación, prevención, reincorporación, integración del núcleo social y familiar y un formador elemental en la óptica de los valores.
"Si haces deporte, ya te quedas con una formación ética, de por qué hay que respetar reglas, respetar a los demás. Aprovecho para decirles a los padres que les dicen a sus hijos 'primero estudia y después el deporte', que no, es al revés, porque con el deporte le estás enseñando al niño algo fundamental que es ganar y perder y cómo recuperarse cuando pierden para volver a ganar", argumentó.
Sobre su ausencia en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, reveló que se debió a que fue por el hartazgo de que las mujeres carecen de apoyos.
"Imagínate que llego a un escenario donde no hay mujeres, o las que había no asumían el papel de estandarte, de abogar por el tema de la equidad, de decidir. El favoritismo era hacia los hombres: tenían mejores uniformes, viajaban mejor, tenían más atención", informó.
Dijo que como atleta sí ayudó a algunas mujeres, abogó por el tema, pero estaba sola, aunque ahora puede hacer más por las deportistas.
"Darme cuenta en esa etapa de mi carrera que quienes toman las decisiones no quisieran hacer nada fue un golpe muy duro. Mis palabras al presidente (de la Conade) en aquel momento fueron que no estaba pidiendo nada para mí, sino para mi generación y las siguientes", reveló.
La exdeportista revela también cómo superó no ir a Beijing, así como sus inicios en el deporte desde los nueve años, la equidad de género en el deporte, que hará como funcionaria y de su retiro del deporte.