En La Zagaleta, exclusiva zona de Europa, donde cohabitan políticos, empresarios y jeques, terminó la fuga de nueve meses que emprendió Emilio Lozoya Austín, exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex).
"¿Dónde iba a estar?", preguntó con sorna una fuente cuando este diario cuestionó por el escondite del otrora poderoso político mexicano, detenido el miércoles con base en una orden de captura por corrupción en la petrolera.
Ubicada en el municipio de Benahavís, La Zagaleta es refugio de algunas de las personas más ricas del mundo y se ubica en la Costa del Sol, cerca de las playas del Mediterráneo y Marbella, balneario de lujo por excelencia, en España.
Ahí, el exdirector de Pemex fue sorprendido al mediodía del miércoles por la policía española. Él no opuso resistencia. La licencia de manejo, que obtuvo en México 15 días antes de concluir el gobierno de Enrique Peña Nieto, facilitó su identificación.
El lugar, dependiente del municipio de Benahavís, tiene una extensión de unas 600 hectáreas de terreno en cuyas colinas se asientan alrededor de 400 villas, entre ellas una antigua del multimillonario armador griego Aristóteles Onassis, según fuentes de inmobiliarias de la zona.
El ministerio del Interior de España aseguró que fue a principios de 2020 cuando detectaron la presencia de Emilio Lozoya en Málaga.
"Las investigaciones llevadas a cabo por la Policía Nacional se prolongaron durante nueve meses, hasta que a principios de 2020 se pudo situar al prófugo en la provincia de Málaga", precisó a través de un comunicado.
Señaló que el alto poder adquisitivo del "fugitivo mexicano" y sus lazos internacionales complicaba su localización.
"Es la urbanización más exclusiva a nivel europeo. Está en un triángulo de oro", comentó en un video promocional la directora comercial de la inmobiliaria Gilmar Marbella, Setareh Mohregi, quien agregó, "el cliente que elige La Zagaleta busca la privacidad, la exclusividad y quiere pasar desapercibido".
Y en efecto, aunque la autoridad no ha dado detalles, investigadores que participaron en la acción dijeron que tuvieron que sortear el impresionante dispositivo de seguridad del complejo para evitar una nueva fuga.
Revelaron que no les sorprendió haberlo detenido allí, a donde pudo llegar por una invitación o con documentación falsa. Y es que, administradores del complejo dijeron que Lozoya no tiene ni ha tenido ahí, jamás, vivienda en propiedad o renta.
De acuerdo a diversas estimaciones, la casa más barata en la zona tendría un precio de más de tres millones de dólares y la más cara superaría los 25, con un promedio de más de diez millones de dólares de precio por villa. En los últimos años se rumora que allí busco residencia el presidente ruso, Vladimir Putin.
"En los registros de seguridad nunca ha constado acceso o salida alguna a nombre de Emilio Lozoya, por lo que si ha accedido al interior ha sido con documentación falsa y como invitado de residentes", detallaron fuentes del complejo residencial.
En las primeras imágenes oficiales sobre su captura, Lozoya era ingresado a las oficinas de la policía de Málaga. Iba vestido con una playera tipo polo y pantalón, ambos negros, tenis, estaba con las manos esposadas hacia atrás e iba custodiado por dos policías.
Las autoridades españolas dijeron que su detención derivó del trabajo de colaboración con autoridades mexicanas y dijo que la Fiscalía mexicana estima en 280 millones de dólares el total de dinero defraudado por Lozoya Austin.
Señaló que esta defraudación se logró gracias a un entramado de corrupción, en el que participaron familiares de Lozoya, por actividades llevadas a cabo entre 2012 y 2013, cuando era director Pemex.
En México, Alejandro Gertz Manero, fiscal General de la República, aseguró que la detención de Lozoya deriva de la orden de aprehensión por el caso de la planta de fertilizantes Agronitrogenados, que en 2014 adquirió Pemex a sobreprecio y advirtió que ya iniciaron trámites para lograr su extradición.
Será en las próximas horas de este jueves cuando Lozoya comparezca en la Audiencia Nacional Española para determinar sobre su proceso de extradición.
Si el exfuncionario se allana al procedimiento, su traslado a México podría tardar días, sin no, se abrirá un juicio que podría prolongarse por meses.