La comunidad médica mexicana y legisladores del PAN reclamaron al gobierno federal la contratación "irregular, costosa y opaca" de médicos cubanos, que "no reúnen las competencias requeridas, no tienen funciones debidamente especificadas, no cuentan con los requisitos establecidos por las leyes vigentes y carecen del aval de los colegios de profesionistas".
Una docena de Colegios, Asociaciones, Federaciones y agrupaciones de médicos especialistas del país expresaron su "profunda desaprobación y enérgica protesta, ante lo que consideramos una falta grave en contra de los profesionales de la salud de México" y estimaron que la intervención de los médicos cubanos "no ha representado ningún beneficio para la atención de nuestra población y sí es una grave falta de equidad para los médicos de nuestro país".
En un desplegado, las organizaciones médicas –como la Asociación Mexicana de Cirugía General, A.C., la Asociación Mexicana de Gastroenterología, A.C. y la Academia Nacional de Medicina, A.C.– reclamaron que "resulta un agravio para el gremio médico mexicano" y un "motivo de indignación que se destinen recursos monetarios, de por sí limitados, erogando honorarios a personal extranjero de manera injusta, pagándoles un sueldo mayor al que percibe un médico especialista mexicano en el Sector Salud".
Criticaron el convenio "entre el gobierno de México y el de Cuba, con el que arribaron a nuestro país 585 médicos y enfermeras procedentes de Cuba, representando un desembolso de más de 6.2 millones de USD".
El cirujano Éctor Ramírez Barba, miembro de la Academia Nacional de Medicina, de la Asociación Mexicana de Cirugía General y de la Asociación Mexicana de Gastroenterología, reveló a El Financiero que el enlace del operativo para la contratación de los médicos cubanos es presuntamente "el principal asesor de la Secretaría de Salud en ese tema, para el Insabi, Joaquín Molina, un cubano naturalizado mexicano, quien fue representante en México de la OMS, un médico jubilado de la OPS, principal asesor de Asa Christina Laurell, para la implementación de su modelo de atención, a decir de ellos. Es un personaje muy capacitado", aseguró.
Ramírez Barba, quien es hoy diputado federal del PAN y secretario de la Comisión de Salud en San Lázaro, comentó que "la molestia entre la comunidad médica es porque hay una total opacidad, no se sabe en realidad cuántos médicos son, dónde están, cuánto nos cuestan, hay varias versiones, si son médicos o no, si Morena contrató politólogos, sociólogos, antropólogos".