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Despachos de cobranza insisten en amenazar a morosos

Aunque la práctica está prohibida por la Ley Federal de Protección al Consumidor, los despachos insisten en llamar en hora no hábiles e incluso amenazar y agredir verbalmente a las personas, que en algunos casos ni siquiera conocen al deudor. 

CIUDAD DE MÉXICO. Despachos contratados por instituciones bancarias para cobrar adeudos, mantienen la práctica de llamadas amenazante y agresivas, en horarios no aptos, para obligar a personas morosas al pago de las deudas con instituciones de crédito.

Dicha práctica está prohibida por la Ley Federal de Protección al Consumidor, que prevé sanciones de hasta ocho años de prisión y multas de hasta 320 mil pesos a quien viole la disposición.

Julio Javier Mejía es una de las miles de personas que a la fecha reciben insultos y amenazas de los empleados de estos despachos, aunque su caso se agrava porque el cobro que le reclaman es de una persona que ni siquiera conoce.

Este hombre de 54 años compró en mayo de 2014 un teléfono móvil al que le asignaron un número que actualmente se encuentra registrado en la cartera vencida de un banco.

Desde entonces son constantes las llamadas que Julio recibe de números del Distrito Federal, del interior de la República, e incluso de Estados Unidos, en la que le exigen el pago inmediato de una deuda que él no adquirió.

"Desde la primera llamada les dije que yo no soy la persona que buscan, pero no entienden y llaman y llaman, incluso de madrugada, para decir que pague o me van a romper la madre, que si no pago me voy a arrepentir, que para que pido dinero", narró.

Y aunque en febrero pasado presentó una denuncia penal ante la procuraduría capitalina, que quedó registrada en el expediente FBJ/BJ-1/42/00833/15-2, las llamadas no cesan y la agresiones verbales tampoco.

Una de estas llamadas grabada por Julio, se comprueba que una persona que se identifica como Roberto Zamudio, del Corporativo Muñoz C. y Asociados, pide le comuniquen con Cristóbal Malaquías, por una deuda con un banco.

--Yo no soy Malaquías señor

--Este es el número que tengo registrado en el corporativo señor por el adeudo con Santander, no es otra cosa, necesita usted liquidar su adeudo, mire por favor liquide ya nos cansamos de estarlo buscando, para que pide dinero si no tiene para pagar, no sea usted pendejo, no sea usted ratero

--Señor no me hable así, yo no le estoy faltando al respeto, ya estoy harto de que me hablen así

--Pinche gente ratera, sino tienen dinero para que se comprometen

--Yo no soy ratero, yo si les bebo les pago, pero ni cuenta con Santander tengo

--Mire si no paga lo vamos a meter a la cárcel por pinche ratero y vividor, cabrón

--Ya no me amenace porque lo voy a denunciar

--Haga la denuncia que quiera después de que nos pague cabrón, pinche ganapán, ya liquide cabrón

El Corporativo Muñoz C. y Asociados, es un despacho reconocido por banco Santander para la cobranza externa.

Según la página de Internet del banco, el representante legal del despacho es Martin Muñoz Gutiérrez, con domicilio en Alcanza Beta, número 94, Col. Industrial Delta, en León, Guanajuato, y número telefónico 477 788-9000 ext. 2103.

Julio Mejía asegura que la manera fácil de resolver este problema es dar de baja el número y sacar otro teléfono, pero buscó ir al fondo para que las autoridades tomen las cartas en el asunto.

"Este número ya está asociado a mis actividades profesionales, tengo clientes importantes, y no quiero que este número empeñe mi trabajo ni mi reputación, por eso presente la denuncia contra el banco, el despacho que me está llamando y la empresa telefónica porque me dio un número con problemas", aseguró.

En marzo de 2013 el pleno del Senado aprobó una reforma a la Ley Federal de Protección al Consumidor, para castigar hasta con ocho años de prisión y multa de 320 mil pesos a quien haga cobros extrajudiciales, mediante técnicas abusivas, además de que su conducta podrá equipararse al delito de extorsión.

En octubre de 2014 y enero de 2015, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), emitió criterios de cómo deben conducirse los despachos contratados por instituciones financieras para la cobranza externa y prevén sanciones económicas de hasta 140 mil pesos.

A la institución de crédito y despacho los obliga a tomar medidas para que los datos de identificación de sus deudores estén actualizados y correctos; llamar sólo al deudor o aval y evitar cobros fuera del horario de 07:00 a 22:00 horas.

Igualmente prohíbe utilizar en la cobranza amenazas, ofender o intimidar al deudor, familiares, compañeros de trabajo o cualquier persona que no tenga relación con la deuda.

Asimismo, obliga a los despachos de cobranza a no utilizar número que aparezcan en el identificador de llamadas como privados, ocultos o confidenciales, o con otra expresión o denominación que imposibilite su identificación.

La violación de estas disposiciones ameritan sanciones económicas que van de 200 a 2 mil días de salario mínimo (14 mil a 140 mil pesos) cifras muy superiores a las del monto del adeudo que le quieren hacer a Julio Mejía.

Cifras de la propia Conducef en México el 10 por ciento de los cerca de 50 millones de personas que cuentan con algún tipo de crédito, tienen atraso en el pago de tarjetas de crédito, hipotecarios o automotrices.

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