Nelly Cortés Silva, jueza de la Ciudad de México, ordenó el inicio de un Juicio Oral a Mónica García Villegas, dueña del Colegio Enrique Rebsamen, a quien se le imputa la muerte de 26 personas, entre ellas 19 niños, tras el colapso de la citada escuela por el sismo del 19 de septiembre de 2017.
La decisión se tomó en una audiencia que se prolongó por casi 18 horas y en la que Miss Mónica no logró un acuerdo de reparación de daños con los familiares de las víctimas, como ella misma lo pidió para que su juicio fuera abreviado y pudiera tener una pena menos severa.
"En realidad a mi no me importa tanto eso (la reparación económica del daño), si yo recibiera ese dinero y ese dinero me sirviera para revivir a mi hijo, entonces ese dinero si tendría un valor inimaginable, porque sería el regreso de mi hijo... lo extraño", dijo Miriam, madre de José Eduardo.
En la audiencia Mónica García Villegas hizo uso de la palabra como parte de su estrategia de defensa y en su intervención no aceptó su responsabilidad en los hechos, por el contrario ostentó que es inocente.
"La he escuchado hablar, la he escuchado argumentar, y la impresión que tengo es que esta señora sigue con su arrogancia, no acepta realmente (lo que hizo), y mucho menos tiene conciencia de lo que provocó en el colegio y de todas las vidas que se perdieron", agregó Miriam, quien estuvo en la audiencia.
La jueza escuchó los alegatos de la defensa de Miss Mónica, así como de los asesores jurídicos de las víctimas, respecto a la reparación del daño. Se desconoce el monto económico ofrecido por Miss Mónica, la cual fue rechazada por los deudos.
Al no haber llegado a un acuerdo, la jueza de etapa intermedia decretó la apertura de juicio oral donde se desahogarán unas 200 pruebas, la mitad de las cuales ya fueron aceptadas y el resto aún sujetas a valoración.
La audiencia se llevó a cabo a puerta cerrada en las salas de oralidad adyacentes al penal femenil de Santa Martha Acatitla. Inició a las 10:00 horas del lunes y se prolongó hasta las 03:45 horas del martes.
En ella, además de Miss Mónica y sus abogados, sólo estuvieron presentes agentes del MP, los abogados de las víctimas y los padres de algunos de los menores fallecidos.