Los altos niveles de contaminación atmosférica, como los que actualmente se registran en la Ciudad de México, pueden derivar en enfermedades cardiovasculares, respiratorias, padecimientos de la vista y hasta cáncer.
La Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe) activó este martes el estado de contingencia ambiental extraordinaria cuando se elevó a 158 puntos la concentración de partículas contaminantes finas suspendidas de 2.5 micrómetros de diámetro (PM 2.5).
¿Qué es lo preocupante? Que a diferencia de otro tipo de contaminantes, como el ozono, las partículas PM 2.5 son ultra finas y fácilmente inhalables. Estas partículas, de acuerdo con información de la empresa de purificadores domésticos Dyson, se conforman de diversos químicos emitidos por los gases de automóviles, fábricas, incendios, combustibles y polvo.
"El tamaño que domina dentro de las PM 2.5 es de un micrómetro para abajo. La cualidad aerodinámica de estas partículas es que son capaces de llegar a los alveolos pulmonares. El sistema respiratorio está diseñado naturalmente para que vaya atrapando las partículas más grandes y no penetren hasta los pulmones. Desafortunadamente, las partículas que son producto de combustión tienen la capacidad de llegar a lo más profundo", dijo en entrevista con El Financiero Ricardo Torres, parte del grupo de investigadores del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM.
¿De qué me puedo enfermar?
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los principales riesgos de inhalar dichas partículas recaen en las enfermedades respiratorias agudas, como la neumonía. Otras de las consecuencias más comunes son sufrir una neumopatía crónica o una crisis asmática.
Mientras tanto, en el mediano y largo plazo los riesgos no son menores. La OMS señala que las personas expuestas durante varios años a concentraciones elevadas de material contaminante tienen un mayor riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.
Una evaluación de la organización, realizada en 2013, determinó que la contaminación del aire por partículas PM 2.5 es carcinógena para el ser humano y está estrechamente relacionadas con la incidencia al cáncer de pulmón. También se le relaciona con el cáncer de vías urinarias y vejiga.
Ante contingencias ambientales, los grupos más vulnerables son los niños y los ancianos. Una de las principales recomendaciones en el corto plazo es evitar las actividades al aire libre.
La Secretaría de Educación Pública (SEP) recomendó, el lunes 13 de mayo, que las escuelas suspendieras las clases de educación física, recreos, actividades cívicas y culturales al aire libre, derivado de los niveles de contaminación.
¿Cómo le afecta a mis ojos?
Rosario Gulias, oftalmóloga especialista de Alcon, dijo en entrevista para El Financiero que la manera más rápida de detectar que la contingencia afecta a nuestra salud visual es la sensación de irritación, ardor y ojo seco, aunque explicó que no hay riesgos de contraer infecciones graves o problemas crónicos por la contaminación.
"A nivel ocular, afortunadamente, no nos provoca ninguna infección o padecimientos graves más allá de una conjuntivitis irritativa", dijo.
"Vas a darte cuenta al sentir irritación, ardor. Se siente como arenilla en el ojo, como basurita, te pica y los tienes que estar cerrando", añadió.
La principal recomendación es acudir al oftalmólogo para determinar el nivel de ojo seco del paciente y así recetar un tratamiento específico. Si bien el uso de lágrimas artificiales beneficia al paciente, existen diversos tipos de este producto por lo que se recomienda que sea el especialista quien indiqué cuáles y de qué tipo usar.
Señaló que no es recomendable el uso de lentes de contacto ya que generarán incomodidad y molestia, además de que pueden agravar un cuadro de ojo seco si es que se está padeciendo.
"No dejan de ser un cuerpo extraño en el ojo. Aunque tienen un nivel alto de agua y dejan pasar el oxígeno al grado de casi casi no sentirlo, en este caso son un factor que está tocando el ojo, por lo que si le añades las condiciones ambientales adversas empezarás a sentir mucho malestar", agregó.
En ese caso el riesgo es el de agravar el ojo seco a un nivel que se requiera un tratamiento más especializado.
¿Qué actividades elevan riesgo?
Una de las principales recomendaciones es evitar las actividades al aire libre en medida de lo posible. El riesgo se incrementa al realizar actividades deportivas y/o ejercicio.
"El ejercicio aumenta el ritmo respiratorio, lo que nos hace más propensos a inhalar más alérgenos", explicó el Dr. Vijay Jotwani, especialista en Medicina del Deporte del Hospital Houston Methodist, mediante un comunicado.
Las consecuencias de no suspender dicha actividad no únicamente se reflejarán en problemas respiratorios, también habría consecuencias en garganta y ojos de la persona.
"Además de tener que lidiar con la correcta inhalación, también el deportista deberá batallar con los síntomas comunes de las alergias estacionales, como congestión, secreción nasal, dolor de garganta e irritación ocular", indica.
¿Qué puedes hacer?
La OMS señala que la mayoría de las fuentes de contaminación del aire exterior están más allá del control de las personas, pero si existen formas de ayudar a reducirla.
"Se requieren medidas por parte de las ciudades, así como de las instancias normativas en sectores como el transporte, gestión de residuos energéticos, construcción y agricultura", indica.
"El aumento de la conciencia del público acerca de intervenciones relativamente sencillas como el mejoramiento de estufas de cocinar y las ventajas de usar el transporte público en vez del automóvil, puede ayudar a reducir las causas de la contaminación atmosférica y el aire de interiores, lo que se traduce en mejoras considerables de salud", dicta la OMS.
La organización considera que las autoridades deben aplicar normas y reglamentos destinados a controlar las emisiones de contaminantes atmosféricos.
También es importante fomentar el uso de vehículos alternativos como la bicicleta en lugar del automóvil, la promoción de plataformas de transporte compartido, la introducción cada vez mayor a la población a los vehículos eléctricos o híbridos y mejoras en la eficiencia energética de los edificios e industrias.
Dyson, empresa dedicada al desarrollo y comercialización de purificadores en casa, recomienda utilizar bloqueadores solares aún cuando esté nublado, para proteger la piel.
También recomienda proteger los ojos con gotas y lentes polarizados con filtros UV. Se recomienda también utilizar cubrebocas o paños húmedos para evitar el paso de micropartículas.
De acuerdo con datos de la OMS, en el mundo mueren 1.3 millones de personas al año a causa de la contaminación atmosférica urbana. Más de la mitad de esas muertes, señala, ocurren en países en desarrollo.
El problema sanitario derivado de la contaminación existe incluso en ciudades con una atmósfera relativamente limpia como Australia, Nueva Zelanda, Estados Unidos y Canadá, indica la OMS.
Alrededor de las 15:00 horas de este martes fue activada también una contingencia por ozono.