ACAPULCO.- Al menos 50 familias que habitaban comunidades de la zona serrana del municipio de San Miguel Totolapan en la región de la Tierra Caliente de Guerrero, salieron huyendo de sus viviendas por la violencia que han provocado bandas del crimen organizado que ahí operan.
Este lunes las familias que vivían en comunidades como Las Mezas y San Rafael decidieron abandonar sus hogares ante los enfrentamientos que se han registrado en las últimas semanas.
A través de una llamada telefónica, un representante de estas familias desplazadas narró que unas 230 personas que vivían en las comunidades decidieron dejar sus viviendas y huir para refugiarse en las cabeceras municipales de San Miguel Totolapan y Ajuchitlan del Progreso, donde tienen familiares o amigos les ofrecieron hospedaje y alimentación mientras las autoridades atienden su situación.
El denunciante, que pidió omitir su nombre, detalló que las familias eran obligadas a darle hospedaje y comida a los sicarios, o de lo contrario los sacaban de sus viviendas y se instalaban ahí, además de que los golpeaban y se llevaban sus pertenencias.
Además de sufrir esas vejaciones, también tenían que cuidarse cuando llegaba el grupo contrario quienes de igual forma les exigían comida y un sitio para descansar, pero además los encañonaban para preguntarles por el otro grupo rival, y si se negaban a responder los acusaban de ser sus cómplices y los golpeaban e incluso algunas personas perdieron la vida por la tortura a la que fueron sometidos.
"Durante las noches o el día, los dos grupos se llegaron a enfrentar a balazos y nosotros teníamos que escondernos debajo de las camas para no ser alcanzados por las balas. Teníamos tanto miedo de ser asesinados que pedimos ayuda varias veces al Ejército Mexicano, pero nunca subieron a nuestras comunidades. No sabemos si por miedo o porque eran cómplices de ellos" lamentó el declarante.
Aunque se abstuvo de identificar a los dos grupos criminales, informes de la Secretaria de Seguridad Pública (SSP) indican que subgrupos de los Caballeros Templarios y de Guerreros Unidos, son los principales responsables de la incidencia delictiva que se registra en esa zona de la Tierra Caliente, a pesar de que desde inicios del 2014 la Policía Federal y Gendarmería asumieron la seguridad en 12 municipios de esa región.