CHILPANCINGO.- Luego de oficiar una misa, este domingo el obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, informó que se ha reunido con integrantes de dos grupos del crimen organizado de la región centro del estado para pedirles que ya no secuestren ni asesinen.
El clérigo recibió a representantes de los medios de comunicación, a quienes declaró que todavía debe reunirse con integrantes de un grupo delictivo más, y que les hará la misma solicitud de detener sus actos de secuestro y asesinatos.
Con los que ya se ha reunido el representante del catolicismo luego de solicitarles que detengan sus actos violentos le dijeron que ellos no son culpables de las muertes violentas, porque sólo se dedican al narcotráfico y que no son sicarios como sus grupos rivales.
Salvador Rangel mencionó que en la región de la sierra, y en comunidades de Chilapa, Tixtla y Chilpancingo hay algunos grupos de personas que apoyan a los cárteles y que se sienten más seguros con la presencia de esos grupos para brindar seguridad que con policías federales o estatales.
Sobre la posibilidad de ser intermediario entre los grupos delictivos y el gobierno estatal, el dirigente católico dijo estar en la mejor disposición de apoyar; y lamentó que las autoridades "por debajo de la mesa tengan arreglos", y sin decir a qué tipo de autoridades agregó: "hay cierta repartición de dividendos".
"la violencia sigue porque no la quieren aplacar", dijo el presbítero; "porque esto del narcotráfico es un gran negocio a nivel internacional y nacional, y ni modo que los de Guerrero sean almas puras", remató.