La construcción del Tren Maya, uno de los proyectos estrella de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, vendrá acompañada de un paquete de apoyos de 35 mil y 95 mil pesos de manera directa para 74 mil 585 mil familias en los 17 municipios de Tabasco, Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, por donde pasará el proyecto ferroviario, para la remodelación o ampliación de sus viviendas en la región, de acuerdo con lo dicho por el secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Román Meyer.
En entrevista con EL FINANCIERO, explicó que los 10 mil 500 millones de pesos que serán destinados a la región para el próximo año y se centra en dos vertientes de un programa con una lógica de desarrollo regional.
En principio, el programa contempla el crear los equipamientos e infraestructura alrededor de las 19 estaciones que tendrá el tren, con atención en servicios básicos, con la construcción de una escuela, un centro de salud, un deportivo o un centro cultural.
Asimismo, como complemento, se entregarían 74 mil 585 mil acciones de vivienda, en la modalidad mejoramiento y ampliaciones, para la región con apoyos que serán entregados de manera directa a las familias, una vez que se concluya el censo que actualmente se realiza.
"Ya los tenemos prácticamente detectados, estamos esperando a la solvencia económica, ya arrancar con el PEF aprobado y estaríamos buscando las futuras ampliaciones, para que por lo menos a mediados de año ya hayamos entregado", explicó el secretario.
Las acciones de vivienda tendrán el mismo esquema que los apoyos que ya se han entregado en las inmediaciones del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), y se dividen, según explicó el secretario, en 35 mil pesos para impermeabilizar, aplanar, cambiar baños, mobiliario de cocina, pues "ya cada familia sabe sus necesidades básicas"; mientras que en el caso de las ampliaciones son apoyos hasta de 90 mil pesos, "para un cuarto, un segundo baño, pues las familias suelen crecer".
Pero las acciones de la Sedatu no sólo se concentran en la entrega de apoyos, ya que, para el desarrollo de la región, se requiere la coordinación con los gobiernos estatales y municipales para actualizar sus instrumentos de planeación y todos los documentos de carácter técnico, que no están actualizados en al menos el 90 por ciento de los municipios del país.
Mientras tanto, los municipios siguen dando permisos de edificación, de construcción, de uso de suelo.
Si bien tienen su autonomía en la toma de decisiones –explicó el funcionario–, la intención es buscar acuerdos políticos para que en menos de un año se pueda, de manera conjunta, dar el reordenamiento de la Península.