El Presidente no se mojó los zapatos y se excusó con sus paisanos. Dijo no ser un farsante ni un 'fifi', negó haber viajado a Tabasco exclusivamente para tomarse la foto y anunció que presentará un decreto con el que supone un nuevo manejo en las cuatro hidroeléctricas de la región para priorizar la protección civil sobre la generación de energía, así como un plan para los más de 238 mil damnificados en la región.
Hoy por la tarde, los gobernadores de Chiapas, Rutilio Escandón, y de Tabasco, Adán Augusto López, se volverán a reunir en Palacio Nacional con el jefe del Ejecutivo para hablar sobre el proyecto que implementaría el gobierno mexicano, para darle salida a la crisis que comenzó desde el 4 de octubre, que empeoró la madrugada del 7 de noviembre, y que no ha tenido solución.
Pero los cuestionamientos ante el manejo de la crisis, la decisión de desfogar la presa Peñitas y su visita a su natal Tabasco, se volvieron los temas de su mensaje matutino, luego de su gira para la supervisión en la entrega de apoyos a damnificados, que quedó registrada con fotografías en las que se le ve al mandatario sobrevolando la región y saludando desde vehículos blindados del Ejército Mexicano.
En principio, el presidente Andrés Manuel López Obrador volvió a exculpar a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) por el manejo de la presa, asumió la responsabilidad de haber inundado las zonas más pobres de Tabasco. Explicó que se optó por un desfogue que causaría inundaciones en las comunidades indígenas, y las más vulnerables de la entidad, para así evitar daños mayores en Villahermosa.
"Sí dije eso, porque lo hicimos, yo lo planteé", fue la afirmación del mandatario, pero no sin acusar la corrupción con la construcción de viviendas en vasos reguladores, según sus declaraciones.
Después de hacer un repaso por la geografía de la región, adelantó que cuando baje el agua, se limpiarán las casas, se desinfectarán, y se fumigará, ya que "la gente está padeciendo por el mosco", para luego empezar con la reconstrucción.
Insistió en que habrá un plan de desarrollo urbano, inversión en carreteras, además de construcción de muros, drenes y reforzar la entrega de programas sociales para adultos mayores, y productores de plátano de Tacotalpa, Jalapa y Teapa.
Anunció que firmará un decreto para el manejo de presas, para que se subordine la protección civil sobre la generación de energía, así como la creación de "un canal ecológico" para mantener vacías las presas.
Según lo dicho, la generación de energía eléctrica no sería lo principal, sino la Protección Civil, "y ya las cuatro presas del Grijalva, las cuatro hidroeléctricas van a tener un canal ecológico, de modo que se mantengan vacías", confió.
Finalmente, el Ejecutivo respondió una vez más a quienes llamó sus adversarios, que le cuestionaron haber visitado Tabasco sin haberse mojado los zapatos, y reivindicó Nacajuca, donde, según dijo, en el pasado enfrentó inundaciones y nadó en el pantano "con el agua hasta el pecho para rescatar gente".
"Ahora me dicen 'a ver, mójese', pues no me puedo mojar nada más por la foto. No, estoy haciendo lo que corresponde, que eso ayuda más.
"Además, les digo a mis paisanos, nada más para tomarme la foto me mojo, me enfermo y ¿qué se gana con eso?, exclamó el Presidente.