Un estudio del Colegio de la Frontera Norte advierte que están en puerta "estallidos sociales y daños a los entornos de convivencia y producción" en el país, si no se diseñan medidas contingentes eficaces en el corto y mediano plazos para enfrentar la etapa posterior al COVID-19.
Plantea que para la reactivación económica y la vuelta a la "nueva normalidad" se requiere de una completa y responsable colaboración entre gobierno federal, sector privado, estados, municipios, sociedad, centros de educación superior y que "le apuesten a una nueva generación de emprendedores y cadenas competitivas".
"Debe preocupar el diseño de medidas contingentes de corto y mediano plazos, orientadas sí al consumo para el bienestar, pero también de otras de mediano y largo plazo, donde se priorice la reactivación de los sistemas productivos y el desarrollo empresarial", señala.
Subraya que "la población en pobreza moderada o extrema es un amplio sector social cuya vulnerabilidad se ha visto acentuada. Representa casi la mitad de la población en México (52 millones 425 mil 887 personas), y en él se concentra el mayor porcentaje de trabajadores en subempleo e informales".
El estudio "Recuperación Productiva y Empresarial PostCOVID-19 Las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas", coordinado por la doctora Araceli Almaraz, destaca que algunos programas públicos de apoyo, como las "Tandas para el Bienestar" o "Crédito Solidario a la Palabra" son "confusos", "insuficientes" y burocráticos.