Existe una alta probabilidad de que los mil 567 centenarios robados el martes pasado de la Casa de Moneda de México sean fundidos y convertidos en lingotes para su posterior comercialización.
Así lo advirtieron joyeros, quienes señalaron que, ante lo mediático del hecho, que incluso alcanzó una difusión internacional, es poco probable que alguien compre dichas piezas en el mercado negro.
"El tema se calentó demasiado, nadie va a querer comprar esos centenarios robados, cualquiera que lo haga se pone de inmediato en la mira de la policía y nadie va a querer asumir ese riesgo", apuntaron.
Señalaron que si hubiera alguien detrás de los ladrones, es porque el robo, incluso, pudo ser por encargo con la finalidad de fundir el oro y hacer un negocio muy jugoso con lingotes.
"Si hay alguna mente maquiavélica detrás de todo esto, es decir, una mente maestra, esos centenarios ahorita ya los estarían fundiendo para hacer lingotes, porque los lingotes se venden más rápido y más caro", explicaron los comerciantes, quienes pidieron el anonimato.
Reportes de la policía local detallan que fueron mil 567 los centenarios robas, cuyo peso unitario es de 37.50 gramos. Es decir, el peso total del botín fue de casi 59 kilogramos de oro puro.
Se podrían hacer hasta 4.7 lingotes de oro, cuyo peso estándar es de 400 onzas (12.4 kilogramos).
Abogados consultados dijeron que los responsables de estos hechos podrían ser acreedores a una pena de hasta 47 años de prisión, dependiendo de su grado y tipo de participación en los hechos.
Gabriel Regino, explicó que, con base en la información pública de que se dispone, podrían existir tres grupos de personas implicadas en estos hechos, que van desde los autores materiales hasta quienes comercialicen lo robado.
Explicó un grupo está integrado por los autores materiales, quienes acudieron a la Casa de Moneda de México, amagaron al personal y robaron los centenarios; otro grupo lo integran los cómplices, es decir, autores intelectuales, y posiblemente empleados de la propia institución afectada.